Ciudad de Panamá.– A Jorge Luis Pinto, extécnico de la Selección Nacional, lo separa un empate para conseguir su tercer título de la Copa Centroamericana (registra dos cetros con la Tricolor), punto que buscará esta tarde contra Costa Rica en la penúltima jornada del torneo regional, que se disputa en Panamá.
La Honduras de Pinto tiene el título en la mano y seguramente saldrá campeón de la edición 13 del certamen de Centroamérica, pero la Nacional no puede permitir que celebre hoy. Sin rayar en lo alarmista, una derrota contra la “H” puede generar más críticas que el mismo empate frente a la débil Nicaragua del martes pasado.
¿Por qué? La respuesta es simple y no hay que darle muchas vueltas al tema: en el banquillo del representativo catracho está sentado Jorge Luis Pinto, el mismo entrenador que con la colaboración de una generación dorada de futbolistas llevó a la Tricolor a cuartos de final del Mundial Brasil 2014. Y es el mismo técnico que se fue por la puerta de atrás al ventilar roces con miembros del cuerpo técnico y hasta jugadores antes y durante la Copa del Mundo.
En pocas palabras, la Selección Nacional no puede darse el lujo de ni tan siquiera empatar hoy, porque eso significa ver a Pinto celebrar con Honduras y escucharlo sacar pecho en la conferencia de prensa postpartido.
Para el cafetero el juego tiene una trascendencia más allá de adjudicarse el tercer cetro de la región en el plano individual. En el fondo guarda cierto rencor por haberse ido del banquillo patrio tras la gran actuación en territorio brasileño. Además, se trata de vencer a la Selección que hoy por hoy está mejor ubicada en el ranking de la FIFA por encima de México y Estados Unidos (aunque por los últimos resultados se perderán posiciones).
CARA A CARA
Desde la salida del colombiano del banquillo tricolor, hace dos años, será el primer cara a cara entre Pinto y la Sele.
El partido puede verse como un abrebocas de los dos enfrentamientos eliminatorios que vienen en la ruta hacia Rusia 2018. En esta oportunidad las principales figuras de ambos seleccionados no estarán. Pero el pulso mantiene el mismo interés por las fricciones que se dieron entre el suramericano y la Tricolor.
JUEGO DE ORGULLO
En lo que respecta al equipo patrio es un partido por el orgullo, tras los dos empates ante El Salvador y Nicaragua. Un choque para mostrar una mejor versión y que futbolistas cuestionados por su pobre rendimiento demuestren que pueden hacer fila para subir al vagón eliminatorio.
El técnico Óscar Ramírez tiene claro los motivos por los que la Sele no se ha visto enchufada en la cancha, pero de igual forma guarda la esperanza de que hoy exhiba otra cara.
“Sé las razones, que no son excusas, de lo que ha pasado en la cancha, las entiendo. Entiendo el momento en el que estamos y la proyección que queremos”, señaló el “Machillo”.
El título se ve muy lejano, para cambiar la historia la matemática dicta que Costa Rica le toca sacar los 6 puntos en disputa y que Honduras no le gane a Belice en la jornada de cierre. Pero en todo caso, el partido más importante de la Copa Centroamericana Panamá 2017 es hoy.
“Será un partido importante para nosotros, lo del profe es secundario, nosotros vemos un partido sumamente importante para nosotros, sabemos que nos vamos a medir a una buena selección como lo es Honduras y es una bonita oportunidad para sacar un resultado positivo que le vendrá bien al grupo”, apuntó el defensor Michael Umaña.
La mesa está servida para el primer careo que tendrá la Selección Nacional con el timonel Jorge Luis Pinto. La misión de la Tricolor es bajar a Pinto de la nube luego de tres victorias en la competición.
