Managua. (AFP) - El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, asume por cuarta vez la presidencia de su país, en esta ocasión con su esposa Rosario Murillo como vicepresidenta, con hegemonía parlamentaria y sin obstáculos para impulsar su agenda.
El mandatario pinolero gobernará hasta el 2022 con el respaldo de 71 de los 92 diputados en el parlamento, comandado por el otrora líder de los sindicatos sandinistas, Gustavo Porras.
"Hoy damos continuidad a todo lo bueno que hemos venido haciendo para corregir lo que no haya salido bien y luego para avanzar en diálogo, alianza y consenso de manera permanente con empresarios, trabajadores, gobiernos locales para luchar contra la pobreza", dijo Rosario Murillo, primera dama y vicepresidenta.
La investidura de Murillo como vicepresidenta es un hecho inédito en Nicaragua y los adversarios de Ortega temen que sea un paso hacia la instauración de una dictadura familiar.
ESPERANZADO
El presidente Daniel Ortega realizó un discurso lleno de sentimiento, donde recordó el potencial que tiene la nación pinolera en muchos aspectos y además la lucha que libró su país para conseguir la paz, momento que aprovecharon los presentes para aplaudir y a su vez aprobar cada frase que dijo quien continuará en el poder 5 años más.
“¿Aquí nos preguntamos por qué Nicaragua, un país con tanta riqueza, con tanto potencial, con tanto capital humano, por qué Nicaragua ha estado colocado entre los países más empobrecidos de toda la región latinoamericana y caribeña? Posiblemente por esa inestabilidad, por esa guerra. ¿Cómo va a poder avanzar un país en guerra? ¿Cómo va a poder progresar?”, señaló el mandatario.
Con respecto a Estados Unidos, uno de los “enemigos” que históricamente han tenido en la vecina nación del norte, aprovechó recordar la sentencia de la Corte de La Haya, cuando esta entidad “condenó” a los norteamericanos a pagar una indemnización a Nicaragua por la “guerra” que sostuvieron los gringos en su contra.
“No pierdo las esperanzas en que Estados Unidos, su gobierno, sus autoridades, reconozcan y acaten esa sentencia”, agregó enfático.
También aprovechó para recordar los enfrentamientos que se dieron en la época de los 80 en su país, calificando a los opositores como “sembradores de cizaña”, mismos que según Ortega provocaron “dolor y sangre entre los hermanos nicaragüenses”.
POLÉMICOS ALIADOS
La ceremonia de investidura realizada en la céntrica Plaza de la Revolución, contó con la presencia de la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, de Bolivia Evo Morales, de Venezuela Nicolás Maduro, y El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, el único gobernante centroamericano que asistió al acto.
Otra de las polémicas delegaciones presentes fue la de Corea del Norte encabezada por el vicepresidente de la Comisión de Asuntos de Estado, Choe Ryong Hae.
Ortega renovó su mandato en un cuestionado proceso electoral celebrado el 6 de noviembre sin observadores y tras eliminar a sus opositores mediante fallos judiciales.
Los principales movimientos de oposición no reconocen los resultados de las elecciones de noviembre y prometen intensificar su lucha en las calles y con denuncias a la comunidad internacional para demandar cambios en el sistema político y unas nuevas elecciones.
Con su tercera elección consecutiva desde 2007, Ortega, de 71 años, se convierte en el gobernante que más tiempo ha ostentado el poder en Nicaragua. Su primer paso como jefe de gobierno fue en 1979, cuando una insurrección popular derrocó a la dictadura de la familia Somoza, y entregó el poder 10 años después a Violeta Barrios, quien lo venció en las elecciones de 1989.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
EMAIL: [email protected]
Miércoles 11 Enero, 2017
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA