Una prueba simple y no dolorosa que mide cuánto oxígeno existe en la sangre del recién nacido permite a los médicos detectar malformaciones congénitas, gracias a ella, los especialistas lograron operar en un año a 290 bebés con problemas en su corazoncito.
De acuerdo con el Hospital Nacional de Niños (HNN), el 1% de los bebés que nacen en el país presenta problemas congénitos en su corazón, de los cuales el 60% requiere de una cirugía complica catalogada por los estándares internacionales tipo 5.
El cirujano Javier Brenes del HNN subrayó que las operaciones tardan alrededor de ocho horas y el nivel de mortalidad de los pacientes es del 1,56%.
Brenes explicó que se están operando menores de 800 gramos a quienes se les detecta el mal pocas horas después de nacer mediante la prueba que se conoce como oximetría de pulso, comenzada a aplicarse este año.
Para la presidenta de la Caja, María del Rocío Sáenz, antes de que se implementara la prueba y de la detección temprana, esos bebés no podían ser operados en nuestro país. “Las operaciones que se están realizando son de las más complejas en el mundo” afirmó.
Sáenz explicó que los resultados del programa quirúrgico tienen que ver con una serie de cambios que se efectuaron y que consisten desde asignar el cuidado crítico a especialistas de cuidados intensivos, renovar la planilla de cirujanos incorporando al equipo médicos más jóvenes entrenados en los mejores centros del mundo.
Los médicos del programa cuentan con la asesoría continua del doctor Eduardo Da Cruz, quien es el jefe del Instituto Pediátrico del Corazón del Hospital de Niños de Colorado, Estados Unidos.
Malformaciones frecuentes
Comunicaciones interventriculares (orificio que comunica los dos ventrículos)
Comunicaciones interauriculares (Comunicación entre las dos aurículas)
Tetralogía de Fallot, estrechez de la arteria pulmonar
Hipertrofia del ventrículo derecho
Acabalgamiento de la aorta, es cuando arteria no sale del ventrículo izquierdo, sino por encima de la comunicación interventricular.
FUENTE: CCSS