Ligadas a las vivencias de pueblos y ciudades, las fiestas patronales que se celebran en todos los rincones del país se han convertido en algo más que un encuentro de fe, ya que la tradición y la cultura también se ha abierto paso, debido a que se mezclan actividades que van desde la comida, música y espectáculos logrando así un mayor atractivo para el disfrute y encuentro de propios y extraños.
“En las celebraciones incluyen muchas cosas, primeramente la fe y ni qué decir de las tradiciones y también es algo del folclore, porque hay fiestas; en algunos casos como San Isidro suele haber bendición de animales, las personas ofrecen hasta la cosecha a la iglesia y la comida tradicional costarricense también llama al disfrute”, explicó Carlos Humberto Rojas, sacerdote de la Iglesia de la Soledad, en plena capital.
SANTOS DE FIESTA
Ejemplo de esta mezcla cultural, fe y tradición lo viven los católicos en todo el país durante mayo con dos celebraciones, donde entre ruegos y agradecimientos acompañarán el 12 a San Pancracio, a quien se le pide interceda por salud y trabajo.
“Yo tengo más de 15 años de rezarle y nunca nos ha faltado trabajo, como ha hecho tantos favores ahora le pido que pueda ir al extranjero, para cuidar a mi hermana que tiene cáncer”, dijo Luz Elena Cortéz, vecina de Barrio Luján, tras rezar la novena frente a la imagen que está en el templo de la Soledad.
Además nos dijo con voz entrecortada: “Es muy doloroso lo que vivo, pero sé que Dios y San Pancracio me harán el favor una vez más, porque la fe y la esperanza todo lo mueven”.
Cientos de anécdotas también guarda en su mente y corazón el padre Rojas: “Aquí vienen fieles de todo el país, algunos están pensionados y vienen para agradecer porque tuvieron salud, motivo por el cual pudieron cumplir sus jornadas laborales”, dijo.
El domingo 8 de mayo y del 9 al 12 de ese mes, quienes lleguen a este templo se reunirán en torno a la fe, pero también a la tradición y la cultura del pan, porque para ellos habrá “un bollito”. El encuentro es tal que permite a muchos compartir gallos y hasta el arroz con pollo que traerán.
A la devoción por San Pancracio se suma la de los agricultores por San Isidro Labrador, quienes esperan recoger de la tierra las mejores hortalizas, frutas, verduras y legumbres para ofrecerlo a su patrono el 15 de mayo, que celebra su día.
“San Isidro es uno los santos más queridos, el pueblo de Dios y con una honda tradición de agricultura, a todo lo largo y ancho del país. San Isidro era un agricultor en España, hay mucha cercanía, se pide la intersección para que proteja los campos, que mande la lluvia en los momentos adecuados”, explicó el sacerdote Rojas.
Es así cómo alrededor de San Isidro y San Pancracio muchos se reunirán para rezar, pero también disfrutar de las comidas, desfiles y actividades culturales que giran en torno a estas celebraciones.
