La Contraloría General de la República le dio al visto bueno al Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) para que destine $78 millones (¢42.352 millones) para la contratación directa concursada de una empresa o consorcio para la ejecución de los estudios previos, diseños y construcción de la ruta nacional 257, sobre la ruta 32, obras que constituirán la edificación del acceso definitivo a la Terminal de Contenedores de Moín (TCM), cuyo plazo de construcción es de 18 meses.
Al mismo tiempo se le autorizó al Conavi proceder a la selección y contratación de una empresa o consorcio para la supervisión del contrato por un monto de $5,5 millones (¢2.986 millones). Ambos proyectos ascienden a ¢45.338 millones.
Para 2016 el Conavi estima que se invertirán $14,3 millones en la obra, de los cuales están incorporados solo $11,8 millones al presupuesto ordinario de Conavi y los $2,5 millones restantes se incluirían en un presupuesto extraordinario.
Lo que sigue es que el Conavi tramite el procedimiento de contratación autorizado, para lo cual deberá invitar a tres potenciales oferentes idóneos, sin perjuicio, según advirtió la Contraloría, que se deban considerar las propuestas de otros interesados que acudan al concurso.
De conformidad con el cronograma de la contratación, se tiene previsto que el procedimiento se adjudique a inicios de mayo de este año y que la ejecución del contrato comience en los primeros días de junio de 2016, informó la Conavi.
La construcción del acceso definitivo a la TCM es una obligación asumida por el Estado mediante contrato con la empresa APM Terminals y que entre otros las obras a realizar son una vía a dos carriles, que es requerida para la entrada en operación del primer puesto de atraque, el cual se tiene previsto que entre en funciones en setiembre de 2017.
Además se deberá construir una vía de cuatro carriles para la entrada en operación del segundo puesto de atraque, que comenzaría a operar en enero de 2018.
Entre los argumentos expuestos por el Conavi a la Contraloría están que la entrada en operación de la TCM impulsará los niveles de competitividad del país, así como en el desarrollo económico y social, al tiempo que generará beneficios importantes para la provincia de Limón.
La Contraloría reclama a Conavi el hecho que se haya atrasado mucho para tramitar la contratación directa concursada, pues la petición fue presentada el 18 de diciembre anterior.
“Si bien este órgano contralor observa que se trata de un proyecto complejo, que ha enfrentado diversas vicisitudes a nivel ambiental y presupuestario, el hecho que se haya tardado hasta diciembre de 2015 para la definición clara de la solución a utilizar con el objetivo de dar cumplimiento a las obligaciones derivadas del contrato de concesión, denota una falta de planificación de parte de la Administración Concedente”, recalca la Contraloría.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
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Sábado 13 Febrero, 2016
HORA: 12:00 AM
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