La expectativa que generó el Movimiento Libertario (ML) con la integración del mercadólogo Iván Barrantes para enfrentar el proceso de elecciones municipales, buscando un remozamiento de la imagen, después del golpe de la sentencia por estafa contra a la agrupación política, no logró concretarse.
La falta de dinero impidió a los libertarios emprender con fuerza el proyecto. Así lo confesó el líder del ML, el diputado Otto Guevara.
“No tuvimos acceso a financiamiento bancario. Se requería una garantía real y nadie estaba en posición de poner una propiedad para responder un crédito. Cuando era presidente había puesto mucho. Ya no puedo seguir poniendo mis activos para respaldar el partido”, argumentó el legislador.
Los libertarios contrataron a Barrantes en octubre del 2015. Su trabajo se popularizó tras ser el impulsor de las “Rutas de la Alegría” del Partido Acción Ciudadana (PAC) y exasesor del presidente Luis Guillermo Solís.
El primer anuncio del Movimiento Libertario que generó Barrantes en redes sociales se cargó de críticas. El spot fue descalificado tanto por el contenido como por la producción. Lo tildaron de agresivo y poco creativo, al basarse en escenas de la película “Revolución: El cruce de los Andes”.
Guevara señaló que al final cada aspirante tuvo que financiarse su campaña. Pese a presentar 67 candidaturas, explicó que se centraron en publicitar 10 cantones.
La acusación por estafa durante la campaña presidencial del 2010 obligaría al Movimiento Libertario a pagar ¢276 millones.
