Luego de quedar en libertad tras la anulación de la sentencia de 5 años por el delito de abuso sexual, Ronald Alán “Chino” Berríos, se abrió con El Diario de Más Venta en Costa Rica y en una entrevista, más que hablar se desahogó del encierro en que estuvo y ahora más que nunca se acercó a Dios, vive la Navidad y aprecia más su vida.
¿Después de esta experiencia amarga qué sentimiento le queda?
-Creo que en la vida uno tiene muchas oportunidades, aunque el juicio continuará, creo que ahora puedo valorar más la vida, especialmente a Dios. Antes me ponía mi estado de Grinch y me daba miedo pasar la Navidad en la cárcel, ahora viví nuevas experiencias y agradezco a mis amigos que están más cerca.
Habla de Dios y la vida, ¿por qué lo cambiaron?
-Dios me dio la bendición de estar aquí, siempre fui creyente, pero ahora entendí más la mano de Dios, que me cuida y me da la oportunidad de que la verdad se escuche. Me sentí condenado sin siquiera haber sido juzgado, el juicio tuvo fallas técnicas, no hubo deliberación de los jueces, por ejemplo.
¿Crees en la justicia costarricense?
-Al permitirme llegar a esta segunda instancia, creo en la justicia y espero demostrar la verdad y que todo esto se arregle. Soy inocente y esto no es de abusos deshonestos, es de rencillas deportivas, la supuesta víctima no fue alumna mía y no se acuerda de nada, la hermana es fiscal y pudo haber alguna influencia y quizás los resultados serían diferentes.
¿Te devuelve este nuevo proceso la fe?
-Me devuelve la paz y la tranquilidad, es un respiro, para poder en otras circunstancias preparar, nuevo juicio, nueva evidencia, nuevos testigos que puedan reafirmar mi condición y un tribunal que sea imparcial y pueda encontrar la verdad de esta situación.
¿Por qué rencillas deportivas?
-En febrero del 2012, tuvo la visita de una entrenadora que iba a competir en EE.UU. y me pide que saque a todos los atletas de la selección nacional, en marzo los atletas se pasan a la U Latina y un mes después, mandé una carta a EE.UU, indicando que esa universidad no podía competir porque tenía menores de edad y no pertenecían a la Universidad, 20 días después aparece la denuncia de la presunta víctima.
¿Hay otra presunta víctima?
-Lo que pasa es que tratan de meter a otra persona que más bien me quedó debiendo dinero y hay un entrenador que se mete acá y fue casi pareja de la muchachita que me acusa e intentan hacer el conecte e involucrarme a mí. Imagínese incluso que hay dos testigos que dicen haberse conocido y luego llegan al juicio y en 9 años nunca se vieron.
¿Cómo ve el futuro?
-Lo veo con fuerza, voy a demostrar mi inocencia, doy la cara y espero me den la fecha para el nuevo juicio y terminar esta pesadilla.
¿Oigo tu voz quebrada, los ojos vidriosos, querés llorar, ya sacaste todo?
-He llorado pero de felicidad, de cuanto cariño hay a mi alrededor, dije en un momento que fui un malagradecido de la vida, renegaba, me sentía solo, pero durante estos meses los mensajes de alumnos, cartas de apoyo de mi familia y verlos antier en este gimnasio, alumnos de hace 25 años, claro que estoy quebrado y ese cariño es invaluable.
Finalmente ¿perdonarías a quienes te inculpan?
-Claro, lo que quiero es simplemente continuar mi vida, que usaran la ley para sacar clavos o cosas personales, honestamente se les salió de las manos y lo que quiero es continuar con mi vida.
PERIODISTA: Alexander Méndez
CRÉDITOS: Foto: Isacc Villalta
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Sábado 05 Diciembre, 2015
HORA: 12:00 AM
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