La entrevista con el seleccionador nacional Óscar Ramírez estaba programada desde hace varios días. Teníamos 15 minutos a solas con él para conversar de varios temas.
Sentado cómodamente en una butaca de la sala de conferencias del Proyecto Goal nos esperaba. Sus primeras palabras fueron: “Aquí estoy más cómodo, ya no me voy a pasar a la otra silla”. Se trataba de un asiento que estaba destinado para el interrogatorio, pero eso pasó a un segundo plano.
Sin poses, casual, nada de trajes enteros ni corbatas, simplemente el “Machillo”, con sus frases populares y lenguaje coloquial. El técnico nos mostró su esencia, esa de un luchador que a puro de trabajo ha cosechado éxitos.
Le comentamos que en esta ocasión romperíamos la monotonía, que los temas futbolísticos quedarían para después. El estratega se acomodó en su espacio y el tiempo empezó a correr.
Fuera de lo deportivo, ¿a qué se dedica?
- Tengo un problema, yo no puedo dedicarme a dos cosas a la vez, cuando me meto en algo es solo eso. Por ejemplo, ahora en vacaciones tenía ciertos negocios porque se me dio el espacio para manejarlos, concordó con que se dio esto de la Selección, se terminaron esos negocios e inició esto.
¿Le falta hacer algo en su vida, aparte de lo futbolístico?
- Nací detrás de mi tata (papá) comerciando, esa parte me quedó por ahí. En ese espacio no me pude realizar tan pleno como me hubiera gustado, esa vena aún está ahí. Soy un tipo al que le gusta el comercio, lo del ganado, comprar, vender.
¿Cómo es su vida en familia?
- Muy casero. Una vez a la semana me escapo con la señora (esposa) para hablar de temas de familia y compartir un poco. Ahora estoy más cerca de la casa y puedo estar más con los chiquillos, pero nunca me olvido del fútbol, siempre tengo que estar relacionado con algo del fútbol.
¿Le reclama la familia esa dedicación al fútbol?
- Yo calculo que tal vez no me lo han expresado, principalmente mis hijos mayores, pero creo que sí debe haber un vacío de ese espacio que siempre le dediqué más al fútbol en la crianza de ellos. Tal vez lo han disfrutado más los dos menores, esos sí me agarraron más en el retiro y he podido compartir más cosas con ellos.
¿Usted es tímido?
- Dicen que nosotros los (hijos) mayores tenemos esa parte porque no tenemos como una guía. La guía es el papá, muchas veces el papá se relaciona con la gente mayor y uno queda como en el aire, ya el segundo hijo (hermano) anda más detrás de uno. Es posible que uno en algún momento tuvo que ser más precavido, no tuvo alguien que le ayudara a aventurarse un poco más.
¿Qué lo hace feliz?
- Ver a los míos felices, pero me entristece que a veces somos tan egoístas porque como sociedad en algún momento podemos ayudar a otra gente y pensamos solo en nosotros.
¿Qué lo saca de sus casillas?
- (Lo piensa) Que traten de burlarse de uno con ironía, que crean que uno es tonto porque pertenece a cierta clase social. Hay gente que considera que puede burlarse de los demás y eso es lo que me saca.
¿Estudia con sus hijos?
- No, la doña (esposa) es la que ha sido el palo de ellos. Yo les digo a ellos que si a alguien tienen que agradecerle, que gracias a Dios está apoyándolos en todas sus carreras, es a la mamá, que ha sido el pilar.
¿Le gustan las series de televisión?
- Sí, me gusta esta de los crímenes (CSI), tal vez va mucho con lo mío por los análisis que hacen para descubrir cosas. Me gusta “¿Quién da más?”, lo de las subastas. También las viejas como “Los Tres Chiflados”, las de acción e históricas me gustan.
¿Lee?
- Antes estaba mucho con lo de los libros, ahora estoy más con las revistas deportivas porque el tema es más digital. En español (materia educativa) me gustaban mucho las novelas como “Las Fisgonas de Paso Ancho” y “Mamita Yunai”. Me identifiqué mucho con “El Moto”, me metí mucho en esa historia.
¿Baila? ¿Escucha música?
- Me gusta, claro. Eso sí tengo yo, cuando es trabajo es trabajo, pero cuando son vacaciones les saco el 2.000%.
¿Cómo se desconecta del fútbol?
- He encontrado una sensación bonita cuando voy a Hojancha (Guanacaste), ahí me involucran en los quehaceres del pueblo, en los chismes, en lo que le pasó a uno y otro, no me ven como esa figura futbolística y me hacen olvidar el tema. Vamos a las fincas o a otros lugares, ese trato me saca de lo que estoy viviendo acá (área metropolitana), que es más deportivo.
¿Cocina?
- Me defiendo. Hago huevos, arroz y frijoles, pero no es mi virtud.
¿Es romántico?
- Sí. Me gustan los tríos, la serenata, todo lo que implique esto me gusta. Los detalles, soy de sorpresas.
PERIODISTA: Andrés Zárate Sánchez
CRÉDITOS: Fotos: Francisco Herrera
EMAIL: [email protected]
Miércoles 23 Septiembre, 2015
HORA: 12:00 AM
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