Ana Martínez, quien murió en Naranjo de Laurel, Corredores, luego de que el carro en que viajaba se volcó y la aplastó, regresaba a su casa a buscar unos productos para hacer las empanadas y el ceviche que le permitían sacar adelante a sus cinco hijos.
Mario Céspedes Martínez y Steven Alfaro Martínez, dos de los cinco hijos que Martínez dejó en este mundo, están muy dolidos por el deceso de su madre, aun así atendieron a El Periódico de más Venta en Costa Rica.
“Mi mamá era una mujer muy luchadora, todo el tiempo trabajó duro para sacarnos adelante y que no nos faltara nada, algún negocio hacía. Nosotros somos cinco hijos, tres varones y dos mujeres.
En el barrio era muy querida porque ayudaba mucho al que lo necesitara, a pesar de sus limitaciones económicas. Siempre fue muy dedicada a la familia”, comentó Mario, el mayor de los hijos.
“Ayer a la hora del accidente ella venía de buscar productos para hacer las empanadas que iría a vender con mucho esfuerzo, pues había hecho un negocio para comprar el carrito en el que ocurrió el accidente, que casualmente lo tenía para ir a vender a Coopeagropal las empanadas y el ceviche”, relató Steven. Quienes la conocieron vieron a una mujer que siempre la pulseó duro en la zona, todos están muy dolidos por su muerte y esperan darle sepultura.
PERIODISTA: Alexander Méndez
CRÉDITOS: Fotos: José Manuel Brenes
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Miércoles 09 Septiembre, 2015
HORA: 12:00 AM