Cansados de que los días pasen sin tener una respuesta clara y positiva a sus demandas, un grupo de al menos 50 campesinos de la finca Chánguena llegaron a los condominios Villa Fontana donde vive el presidente de la República, Luis Guillermo Solís, para exigir respuestas sobre el desalojo realizado semanas atrás y exigen conocer las soluciones que tiene el Gobierno para resolver la problemática que los afecta.
Semanas atrás, los agricultores fueron desalojadas tras una orden judicial, con lo que 100 familias fueron obligadas a dejar las tierras, lo que motivó que se dieran bloqueos y reuniones con las autoridades de gobierno, pero sin lograr acuerdo alguno.
Los campesinos llegaron con niños y adolescentes con la consigna de no retirarse hasta ser atendidos por el mandatario, por lo que durante varios minutos estuvieron apostados en los jardines ubicados a la entrada principal de los condominios.
Esta situación provocó que aumentara la presencia policial, por lo que la cantidad de agentes de la Fuerza Pública se incrementó de manera importante, al punto que, a varios metros del lugar, había una buseta con los antimotines.
Las palabras entre campesinos y Fuerza Pública subía de tono y uno de los momentos de alta tensión fue cuando la policía indicó a los manifestantes que si no se retiraban tenían órdenes de quitarlos a la fuerza, aspecto que motivó el reclamo y confrontación de los agricultores.
No fue hasta que llegó el comandante Cruz que los ánimos comenzaron a bajar y este les explicó las razones por las cuáles no podían estar allí y les recomendó enviar una carta con las peticiones a Casa Presidencial, de lo contrario se tomarán otras acciones, las cuales no precisó.
Los manifestantes optaron por pasarse a la acera de enfrente, pero recalcaron que se mantendrán allí hasta que el gobernante les atienda pues ya no quieren reunirse con el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro.
“Hay que recordar la promesa de campaña del Presidente. Dijo que si no me encuentran búsquenme y efectivamente ahora los estamos buscando para que nos dé una explicación del por qué el gobierno de la República actuó de manera irregular con el desalojo de las fincas Térraba y Chánguena, toda vez que las explicaciones que los funcionarios de gobierno nos han dado al a fecha no nos han convencido”, aseguró Diego Villalobos, presidente de Cootraosa.
Añadió que “de una vez por todas, exigimos que se resuelva el tema de Chánguena. La solución del problema está del lado del gobierno que no ha querido resolver”.
Mientras los manifestantes esperaban respuestas se intensificó el despliegue policial, por lo más policías llegaron a resguardar el condominio donde habita el presidente Solís.
CAMPESINO ULTRAJADO
Por su parte don Pedro Ortiz Villarreal, conversó con El Periódico de Más Venta en Costa Rica, el mismo explicó que el pasado 31 de julio cuando se ejecutó el desalojo, fue víctima de un presunto robo.
“Yo me quedé en casa, cuando llegaron a sacarme les dije que si querían entraran que yo no tocaría nada, en ese momento ni la policía, ni el abogado de Oscar Echeverría entraron, me fui y al volver encontré las cadenas de la casa violentadas, un cajón donde tenía ¢300 mil de Cootraosa sin el dinero, se llevaron varios electrodomésticos y a la fecha nadie me da respuesta del paradero de las cosas, y la policía lo único que hizo fue decir que ellos no entraron y que le preguntará al abogado de Echeverría”.
DIARIO EXTRA acompañó a Ortiz, hasta las delegaciones policiales de Palmar Sur, pues nos indicaron que el teniente Martín Morera, era el encargado de hablar al respecto.
Morera fue escueto e indicó que no sabía nada al respecto, pues ellos solo ejecutaron el acto de desalojo y acompañaron al abogado del ejecutor del acto. Sin embargo Ortiz, indica tener testigos de ver a policías sacar sus cosas de la casa, no obstante Morera mencionó que no es deber de la Policía entrar y sacar esos bienes y en todo caso el abogado de Echeverría levantó un inventario de las cosas y era este el que debía respondernos.
Por tal motivo conversamos con el Licenciado José Jeiner Villalobos, director jurídico del Ministerio de Seguridad Pública y aseguró que precisamente para evitar estos malos entendidos, la policía según el protocolo, no tiene por qué sacar pertenencias de las viviendas, en cuyo caso se levanta un acta y se deja en manos del ejecutor del acto, como ocurrió en esta situación, donde el abogado del ejecutor levantó un inventario.
Ortiz mencionó que a la fecha no ha recibido los bienes sacados por la policía de su vivienda y tampoco ha recibido notificación del abogado que dice la policía levantó el acta.
Al final Ortiz señaló que si tiene que denunciar un presunto robo por parte de la autoridad lo hará, pues al final fueron estos los encargados de velar por sus bienes que hoy no saben si están perdidos o fueron sustraídos.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
CRÉDITOS: Fotos: Carlos Barquero
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Viernes 21 Agosto, 2015
HORA: 12:00 AM
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