El presidente de la República, Luis Guillermo Solís, calificó de injustos los pluses salariales que gozan algunos empleados, como son los privilegios que se otorgan en las instituciones públicas.
El mandatario se refirió a estos incentivos en cadena nacional, cuando indicó que el gasto público se ha disparado. Solís señaló además que hace casi 10 años, el Estado costarricense está gastando más de lo que recibe y que su administración “está corrigiendo” esos excesos.
El presidente brindó estas declaraciones en el marco de la necesidad que, según él, tiene el país de recaudar impuestos y de gravar nuevos tributos, como lo propone el gobierno actual mediante dos proyectos de ley.
“Costa Rica tiene la urgencia de modernizar el cobro de sus impuestos para que la población reciba mejores servicios y obras públicas. Por ejemplo, necesitamos más escuelas y colegios, más policías, más hospitales, mejores carreteras y más guardaparques”, indicó el mandatario.
LA PROPUESTA
Según Solís, entre los proyectos presentados esta semana a la Asamblea Legislativa, se encuentran el cambio del actual impuesto de ventas por el tributo al valor agregado, conocido como IVA y un aumento en el impuesto sobre la renta que solo golpearía a un 3% de los asalariados.
Solís mencionó que alimentos de uso diario en los hogares, como arroz, frijoles, pan, tortillas y legumbres estarían exentos del IVA, así como los consumos moderados de agua y electricidad.
Con respecto al impuesto de ventas, el presidente mencionó que desde 2014 su administración ha propuesto proyectos de ley como gravar las pensiones de lujo con cargo al presupuesto, otro de combate al fraude fiscal, el que mejora la lucha contra el contrabando, la Ley de Gestión de Caja Única, y uno más para poner orden en las exoneraciones de impuestos”.
