Sábado 18, Mayo 2024

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° San José, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Alajuela, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Cartago, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Heredia, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Limón, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Guanacaste, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Puntarenas, CR

Opinión

Corrupción por los cuatro costados

Editorial

La mafia en el fútbol viste de pantalón largo y corbata... cuesta creer que el deporte rey, que tantos seguidores tiene en el mundo, esté corrompido y sucio, pero con lo que se dio en la presente edición de la Copa Oro queda en evidencia.

 

¿Se necesitaban más pruebas para caer en la razón que la Concacaf es corrupta? Los altos mandos llevaron a México a la final y de eso no hay ninguna duda. Tres penales que no fueron son la prueba más clara, pero además las acciones se dieron en un tiempo donde el equipo perjudicado no tenía reacción de nada. A la Selección de Costa Rica le señalaron un penal que nunca existió al último minuto del tiempo extra, pero además de ese descaro la falta que no fue la reclamó un jugador que minutos antes se tuvo que haber ido expulsado por una violenta entrada contra Elías Aguilar. ¿Cómo se le llama a eso? Robo.

 

Y por si fuera poco, días después la Selección de Panamá sufre con lo mismo. En DIARIO EXTRA en la previa titulamos: “Panas contra el árbitro y México”. Porque se veía venir que México tenía que estar en la final a como fuera lugar, porque para la Concacaf es el que llena los estadios y eso significa muchos millones para seguir haciendo sus chorizos con los derechos de televisión, casualmente por lo que están acusados varios dirigentes de esta confederación.

 

Los panameños sufrieron el mismo robo que los ticos, la misma decepción por un asalto a mano armada. ¿Y a esos dirigentes quién los sanciona, quién los saca de sus puestos? Lamentablemente nadie porque están chupando de una teta que les produce mucha plata y que además todos se tapan con la misma cobija.

 

La final soñada y esperada para la Concacaf es México -porque llena estadios por su amplia colonia en gringolandia- y Estados Unidos -que siempre es el anfitrión-.

 

Esta vez la mano negra no podrá tener esa final porque Jamaica lo impidió eliminando a USA, y porque en la cancha estaba un árbitro tico al que no se atrevieron comprar, en hora buena por eso, porque hay que señalar que fue un buen arbitraje. No como la cochinada que se tuvo en el partido México-Panamá, juego en el que claramente desde un inicio el cuarteto arbitral salió con una camisa, la de los manitos. Sus decisiones siempre fueron contra los canaleros, que en la cancha dejaron alma, vida y corazón para llegar a la final, se esforzaron, sudaron y estaban a un minuto de ganar cuando entró de cambio la mano peluda. Desde arriba los altos mandos se vieron contra la pared porque se estaba cuajando una final inesperada, que ninguno de ellos quería, y el central se inventó un penal para que México empatara, porque por incapacidad no lo pudo hacer durante 89 minutos. Y por si fuera poco, después se inventó otro penal para que los aztecas sacaran la tarea. ¡Qué fácil así!

 

Entonces de qué valen tantas horas de entrenamiento, sacrificio, agallas y pundonor para jugar con justicia por un resultado, cuando los señores de saco y corbata tienen en sus planes cuál será el finalista.

 

No en vano dirigentes de esta confederación fueron arrestados en Suiza por hacer chorizo con los derechos de trasmisión, no en vano han sido cuestionados. 

 

La Concacaf quedó por segunda vez en entredicho, tenía la oportunidad para lavar la imagen por el arresto de varios de sus dirigentes y la desaprovechó, pudo más el chorizo que otra cosa.

 

Admirable también la forma en la que los panameños, a quienes les robaron, salieron a defender su escudo, dando fuertes declaraciones contra una Concacaf corrupta, que seguramente tomará la medida más fácil de sancionarlos, pero alzaron la voz con coraje, no como los jugadores ticos incluyendo al cuerpo técnico, que se refirieron muy light al asalto que sufrieron. Las cosas hay que decirlas por su nombre y en estos momentos la corrupción en la Concacaf es por los cuatro costados, manchando a un deporte que tantos fanáticos tiene, que sufren, lloran o celebran victorias y derrotas.

PERIODISTA:

EMAIL:

Viernes 24 Julio, 2015

HORA: 12:00 AM

Enviar noticia por correo electrónico

SIGUIENTE NOTICIA

ÚLTIMA HORA