El pasado martes en horas de la noche en el barrio Pacuare Viejo de Limón, un joven de 24 años perdió la vida tras recibir al menos cuatros disparos en el pecho y extremidades; este es uno de 5 casos de personas inocentes que en el último semestre murieron como consecuencia de tiroteos del narcotráfico.
Según las autoridades, no existe una forma de dividir las pesquisas de un crimen como si fuesen inocentes, o si de forma eventual se les vincula con una agrupación criminal, esto complicaría la culminación de un proceso de investigación por homicidio.
Michael Soto, jefe de la Oficina de Planes y Operaciones del Organismo de Investigación Judicial, señaló que a futuro debería implementarse una herramienta en las bases de la policía que permita saber si una persona es o no colateralmente víctima del crimen organizado.
NIÑO MUERE POR BALA NARCO
Dennis Mora, un niño de apenas 10 años, ha sido uno de los homicidios más lamentables que al OIJ le tocó llevar en los últimos años. Paso Canoas, tierra casi propiedad del narcotráfico, se convirtió en el escenario donde una bala perdida acabó con la vida del menor.
En días anteriores Yuri Pérez, tía del fallecido, comentó a DIARIO EXTRA que la situación que viven es trágica, su comunidad es demasiado tranquila como para poder creer que la policía no puede controlar a los criminales, mucho menos para poder asimilar que la investigación de muerte de su familiar está catalogada como “inocencia”.
La división de territorios de diferentes agrupaciones criminales en Costa Rica, ha provocado que se desate una guerra por el control de plazas y diferentes sectores caracterizados por su provecho para el tráfico de drogas.
SANGRE CORRIÓ EN SAN JOSÉ
Paul Martínez Zapata de 49 años, fue asesinado por dos sujetos que viajaban en una motocicleta, la noche del sábado 9 de agosto del año pasado en el barrio Calle Fallas de Desamparados, sitio donde se desató una descomunal guerra entre dos clanes narco que durante cinco disputaron meses el control de venta de droga en el cantón.
Dicha lucha, se cobró la vida de al menos 100 personas, entre ellas Martínez Zapata, que es un inocente más de la lista.
Gustavo Mata, ministro de Seguridad, señaló en esa oportunidad a DIARIO EXTRA, que precisamente la intención de los diferentes despliegues hechos en el cantón desamparadeño, era evitar la muerte de personas que no tenían nada que ver con lo que estaba pasando, sin embargo, no se pudo controlar.
Como en los casos anteriores, la policía no sabe quién fue el responsable, o si el fallecido aparece como un inocente del crimen organizado. Aparte de los constantes decesos, el Organismo de Investigación Judicial atendió balaceras que involucraron sin querer a vecinos de barrios como Sagrada Familia, Coronado, Guadalupe, Desamparados, Cristo Rey, San Sebastián y La Unión de Cartago.
Uno de los eventos más recordados, fue el megatiroteo ocurrido la noche del 23 de noviembre del 2014 en Sagrada Familia, cuando dos bandas familiares se dieron a tiros.
Producto de ello, dos menores de 4 y 8 años respectivamente fueron heridos de gravedad.
DIARIO EXTRA intentó conocer el punto en que se encuentra cada uno de los casos antes citados, sin embargo en la oficina de prensa del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) no atendieron la consulta.
