El Ministerio de Salud permitiría el uso en el país de productos derivados del cannabis (que es uno de los componentes de la marihuana) para fines medicinales con el fin de tratar ciertas enfermedades y padecimientos.
Dicha posibilidad forma parte del criterio técnico emitido por la cartera de Salud a la iniciativa denominada “Proyecto de ley para la investigación, regulación y control de plantas Cannabis y Cáñamo para uso medicinal, alimentario e industrial”, impulsada por el diputado del Partido Acción Ciudadana (PAC) Marvin Atencio.
Fernando Llorca, ministro de Salud, aseguró que el criterio emitido por esa instancia es meramente técnica y para su formulación fueron empleadas informaciones y opiniones científicas relevantes en la materia.
“Los productos derivados del cannabis que van a ser utilizados como medicamentos podrían ser autorizados para tratar enfermedades o problemas de salud en extremo científicamente justificados, dentro de una buena práctica médica y como última alternativa, luego de haber agotado las opciones terapéuticas actualmente existentes”, afirmó Llorca.
Llorca sostuvo que el criterio no es la apertura hacia una legalización abierta del uso de la marihuana porque queda prohibido el consumo o uso recreativo, turístico y comercialización para el fumado, aspecto que está normado por la “Ley sobre estupefacientes, sustancias psicotrópicas, drogas de uso no autorizado, actividades conexas, legitimación de capitales y financiamiento al terrorismo”.
Sobre esto, Llorca enfatizó que “ni siquiera estamos contemplando la posibilidad de recomendar el uso de la marihuana con fines medicinales. Lo que estaría dispuesto a autorizar el Ministerio de Salud es única y exclusivamente productos químicos y específicos que se derivan del cannabis y que han demostrado que existe una amplia evidencia científica de que han tenido un efecto positivo para tratar algún grupo de enfermedades”.
OTROS NO
Por otro lado, el Ministerio de Salud está contra la creación del Instituto de Investigación, Regulación y Control del Cannabis y el Cáñamo (Iirca) como una instancia a parte de dicha cartera, sino que plantea que debe ser un ente adscrito a ese instituto porque es Salud el que tiene la potestad, por ley, a regular la investigación en el registro de productos.
Llorca mencionó que existe la “Ley reguladora de investigación biomédica”, cuyo objetivo es realizar normativas en la investigación biomédica con seres humanos en materia de salud, en los sectores públicos y privados.
En el caso de los establecimientos que sean utilizados para la producción y comercialización de medicamentos, alimentos y otras industrias asociadas a la producción de cannabis, Llorca recalcó que deberán cumplir con las leyes nacionales e internacionales.
“No contemplamos la posibilidad de hacer dispensarios de estos productos, porque la legislación costarricense es muy clara en que las farmacias son los establecimientos diseñados y tienen los controles para dispensar cualquier tipo de medicamento, incluyendo los psicotrópicos y otros que podríamos considerar de cierta peligrosidad”, mencionó Llorca.
En un comunicado de prensa emitido por ese mismo ministerio se indica que “no se requiere llevar un control de pacientes con carné a los que se prescriben medicamentos con cannabinoides por ser un acto discriminatorio, las prescripciones se registran en los expedientes clínicos y se controlan por medio de las recetas especiales, que para tal fin defina el Ministerio de Salud, las cuales se expenden en las farmacias y controlan por el Ministerio de Salud”.
Llorca detalló además que en la actualidad no existe prohibición alguna para el registro y comercialización de alimentos y cosméticos a base de cannabis, pero las empresas interesadas deben cumplir con una serie de requisitos establecidos en la ley.
NO ES FUMADERA DE MONTE
Al respecto, el presidente de la República, Luis Guillermo Solís, defendió el informe presentado por el Ministerio de Salud y reseñó que se debe hacer una diferencia entre el consumo recreativo y lo que sería el uso del cannabis de la marihuana.
“No estamos hablando aquí de una fumadera de monte, no es lo previsto, sino el uso procesado, comercializado e industrializado altamente controlado por el Ministerio de Salud y otras dependencias científicas”, reafirmó Solís.
Por su parte, Luis Eduardo Sandí, director ejecutivo del Instituto de Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), se mostró complacido por la respuesta del Ministerio de Salud, pues manifestó que la esta responde a una serie de observaciones y recomendaciones emitidas por ese instituto.
Recordó que el cannabis es uno de los entre 400 y 500 componentes que integran la marihuana y recalcó que esta como tal es dañina, en especial para las personas que lo consumen a muy temprana edad. Señaló que hasta entre los 18 y 25 años el cerebro deja de desarrollarse, por lo que su uso puede ocasionar daños psicoativos, generar efectos negativos en coordinación, aumentar los accidentes y los trastornos de comportamiento e incidir en la memoria, entre otros aspectos.
“El documento del Ministerio de Salud viene a limitar, de manera muy importante, la versión original del proyecto de ley que fue presentado, pues se hace eco de las observaciones que hace el IAFA sobre los efectos del consumo de la marihuana”, dijo Sandí.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
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Miércoles 03 Junio, 2015
HORA: 12:00 AM
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