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Nacionales

Costurera sin manos corta con tijeras sus problemas

En San Gabriel de Aserrí

  • María Eugenia Rojas es un ejemplo de que cuando se quiere se puede

  • Aquí cuando era jovencita

  • Sus hijos son su fuente de inspiración. Aparece con Allison de 12 años, Jimmy estaba en el colegio en el momento de la foto

  • Sueña con tener un tallercito, ya que debe poner la máquina de coser en la mesa donde comen y hacen las tareas los chiquillos

San Gabriel, Aserrí.- Nacer sin manos no ha sido impedimento para María Eugenia Rojas Córdoba, mujer valiente de San Gabriel de Aserrí, quien a sus 45 años no le tiembla el pulso para coger una tijera y hacer una camisa o un pantalón con su máquina.

 

Su brazo derecho le llega hasta el codo y el izquierdo justo antes de donde empezaría la mano. Pero además le falta el pie derecho, por lo que debe utilizar una prótesis. 

 

Sus hijos Jimmy y Allison son la inspiración de esta madre soltera que abre su corazón y cuenta su caso no porque quiera, pues señala que nunca le gustó salir en cámaras, pero da la cara por sus retoños.

 

Este año es muy especial, Jimmyto se gradúa de quinto año y su princesa Allison terminará la escuela. Son dos momentos especiales, sublimes, pero al igual dolorosos. Es que no sabe cómo va a hacer con esas graduaciones, pues no se atreve a pensar de dónde sacará el dinero para que vayan bien vestidos, ni para cubrir los gastos de estas actividades que solo se dan una vez en la vida. Ella sabe lo que significan para los que son sangre de su sangre. 

 

La menor de cuatro hermanos nos contó que ver cosiendo a su mamá Margarita Córdoba, desde pequeña, la motivó a luchar por lo suyo y es con lo que ahora lleva comida a su casa, pues no volvió a saber de cuadernos y estudios cuando salió de tercer grado de escuela. “No me aflijo para sacar una camisa o un pantalón, aprendí casi sola al ver a mi mamá. Desde chiquilla traveseaba la máquina de mano. Creo que fue la primera que trajo Cristóbal Colón”, dijo entre risas, con relación a la antigüedad de aquella.

 

VIENEN LAS GRADUACIONES

 

“Ahorita estoy con las graduaciones porque los dos me salen este año, una de sexto grado y el otro de quinto año. Son gastos de los que ni quiero sacar cuentas. Los dos reciben beca y ahí voy poquito a poquito, pero todavía me falta cualquier cantidad. Estoy cruda. Esto es demasiado duro. Imagínese que me mantengo con una pensión de ¢75 mil por mes. Es demasiado poco lo que queda para la casa”, explicó esta madre soltera que también ha trabajado en fábricas de ropa y calzado. 

 

SU SUEÑO ES PONER UNTALLERCITO

 

Su cara se llena de ilusión cuando le pedimos que nos hable de su meta. “Lo que siempre he soñado es tener un tallercito donde pueda ponerme a coser. Es que mi casa es muy pequeñita”. Pone la máquina de coser en la mesa y debe quitarla para cuando comen o hacen las tareas.

 

TIENE MANOS Y PIE ASÍ
DESDE QUE NACIÓ 

 

Le preguntamos por sus brazos, si fue producto de algún accidente o nació así y nos reveló su caso. “La verdad es que como usted me ve las manos, igual tengo los pies. Yo nací así, nunca supe porqué, dicen que es porque mi papá tomaba. No tengo ningún tratamiento, solo necesito la prótesis. Esto lo tomo a veces como desesperante, pero si le pongo a dar vuelta al final me enfermo. Como uno dice lo que hago es hacerme la mae, pero solo uno sabe cómo está la mente, dándole vueltas”. 

 

Invitó a quienes no le ponen ganas a la vida o se sienten desmotivados a que luchen por sus metas. “Para mí la vida es muy bonita, a pesar de que a veces tiene sus enredos. Que sigan adelante con mucha fuerza”.

 

Sueña con darles estudios a sus hijos y a cada rato les recuerda que se pongan las pilas estudiando. “Voy a ver hasta dónde Dios me ayuda a sacar ese sueño. Ahora le decía a mi hija Allison 'póngale, porque si yo tuviera plata -pues si me muero les queda-, pero lo que les puedo dejar es la casita'. Les vivo diciendo que estudien para que se defiendan”. 

 

Ha tocado puertas y no se las han abierto. Cuenta que visitó el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) pero le dijeron que no había presupuesto. “Tengo la fe de ir otra vez a pellejearla al IMAS a ver, quien quita un quite y hay presupuesto”. Se le hace difícil ir a hacer esas vueltas y pedir ayuda, pues sabe que cada una de ellas es gastar en pases y comida, dinero con el que no cuenta. 

 

Ella ofrece sus servicios en labores de costura para salir adelante. Si la desea contactar la puede llamar al 8407-7307. Su cuenta del Banco Nacional es la 200-01-096-027860-7 y la cuenta cliente 15109620010278600.

PERIODISTA: Alejandro Fonseca

EMAIL: [email protected]

Miércoles 06 Mayo, 2015

HORA: 12:00 AM

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