Domingo 05, Mayo 2024

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° San José, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Alajuela, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Cartago, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Heredia, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Limón, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Guanacaste, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Puntarenas, CR

Sucesos

Minicarteles criollos dividen en 3 a tiquicia

Más de 250 homicidios por ajusticiamientos en la capital

  • Paso Canoas es otro de los puntos vulnerables por esta pandemia

  • La seguidilla de homicidios por disputas entre bandas criminales nacionales fue catalogada como masacre

  • En Limón, uno de los lugares controlados por narcos ticos, se movilizan varias toneladas de marihuana por mes, aunque solo una parte es detectada

  • El OIJ y el Ministerio de Seguridad registran decenas de causas contra costarricenses por narcotráfico

Tres zonas tienen a Costa Rica en cifras rojas debido a la presencia de organizaciones criminales conformadas, plenamente, por costarricenses denominados ahora “minicarteles criollos”.  

De acuerdo con Michael Soto, jefe de la Oficina de Planes y Operaciones (OPO) del Organismo de Investigación Judicial, estas son Limón, Paso Canoas y el suroeste de San José. 

“Nos hemos enfrentado a un considerable incremento de actividades criminales por parte de estos clanes conformados por costarricenses, un ejemplo de ello es, que de los más de 400 homicidios en el 2014, cerca de 191 fueron por ajustes de cuentas, mayoritariamente en Limón y San José”, afirmó Soto en entrevista con El Periódico de Más Venta en Costa Rica. 

Y es que los asesinatos se convirtieron, sin duda alguna, en una piedra en el zapato de la policía.  Según números del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en 2013 hubo 411 crímenes en el territorio nacional, mientras que en 2014, la lista subió hasta 471. 

Por otra parte, estadísticas suministradas por el Ministerio de Seguridad Pública, señalan que en 2014 se logró el decomiso de 21,7 toneladas de cocaína, esparcida en diferentes sectores del país, de la cual aproximadamente un 50% fue manipulada por  clanes criollos de Tiquicia. 

 

CON ORGANIZACIÓN EMPRESARIAL 

 

Soto añadió que en los múltiples casos investigados por la policía judicial, como fue la desarticulación de la banda de El Indio en Desamparados, lograron detectar una forma muy organizada de funcionar dentro de las agrupaciones, pues los integrantes tenían diversos cargos que cumplir bajo un perfil empresarial.

“Cuando arrancamos con la investigación para detener a la banda de Zamora -El Indio-, vimos datos muy interesantes, por ejemplo, tenían personas encargadas de la administración de los búnkers, otros hombres que únicamente estaban destinados a organizar y controlar la plata del grupo, otros eran los cobradores y finalmente estaban los repartidores y mensajeros de la droga, cada uno con obligaciones específicas, todos bajo la tutela de El Indio, que hacía de ellos una verdadera organización criminal”, explicó el investigador.

 

LIMÓN: REINO DE LA MOTA

 

En Limón existen  dos organizaciones totalmente identificadas por el OIJ y la Fuerza Pública, las cuales se desenvuelven en los barrios Cieneguita y Limoncito. Esto fue confirmado por el mismo Micheal Soto, jerarca de la Policía Judicial, quien añadió que los actos cometidos por el crimen organizado en el Caribe, tienen que ver más con la venta y distribución de marihuana.

“El negocio en Limón, que además se une a Paso Canoas y el suroeste de San José como zonas controladas por narcotráfico costarricense, tiene que ver con la marihuana High Red, la cual es traída desde Jamaica. En lo relacionado con homicidios se atienden más de 40 por año, todos por ajuste de cuentas, diferente a lo que pasa en otras provincias”, argumentó Soto. 

 

PASO CANOAS:
TIERRA DE NADIE

 

La situación que vive la frontera sur de nuestro país con la presencia de carteles mexicanos y colombianos, vino a desencadenar la creación de grupos de narco con identidad costarricense, los cuales han reflejado una lucha por territorio, que en los últimos meses ha cobrado la vida de unas 35 personas.

“Es totalmente distinto lo que pasa en un sector como Paso Canoas al sur del país, donde las personas que están involucradas en el negocio criminal, tienen que ver más con los cobronazos, si vemos con detenimiento, en ese punto hay muchos tumbonazos y a partir de ahí vienen los homicidios, que se dan por el tráfico de droga robada”, detalló Micheal Soto, jefe de la OPO.

 

MASACRE EN SAN JOSÉ

 

Al mejor estilo de las novelas colombianas sobre la vida de Pablo Escobar, se encuentra el sector suroeste de la capital costarricense, debido a la guerra en  que se encuentran tres agrupaciones criminales por apoderarse del territorio para la venta de drogas.

Alajuelita, Pavas, Desamparados, Tres Ríos y Goicoechea, son sólo cinco de los sitios donde se ha desarrollado una lucha entre bandas narcotraficantes, que desde agosto del año pasado hasta hoy, se ha cobrado la vida de unas 100 personas.

Lo más preocupante, es que solo entre Desamparados y Pavas llevan más de 80 víctimas, hecho calificado por Soto como una verdadera masacre.

“Si consideramos el tamaño, no sólo de Costa Rica, sino de lugares como Desamparados y Pavas, es terrible ver la cantidad de muertos por ajusticiamientos. No me gusta el término colombiano sicariato, prefiero decirle ajuste de cuentas. Analizando esto con mente fría, nos damos cuenta que estamos frente a una masacre”, puntualizó el funcionario judicial.

 

BÚNKERES GENERAN COMO BANCOS 

 

Tal vez usted se preguntará como es que sobreviven estas bandas en barrios con niveles tan bajos de desarrollo socioeconómico, pues lo siguiente le va a dejar muchas dudas canceladas.

Michael Soto, jefe de la OPO, explicó que la guerra se produce debido al excesivo ingreso de dinero en los denominados “búnkeres” donde se almacena y vende ya sea marihuana o cocaína. 

“Un kilo de cocaína en nuestro país alcanza los $7 mil, es decir aproximadamente ¢3,5 millones. Cuando ese kilo de coca es llevado a un búnker para que lo cocinen para hacer piedras de crack, se pueden extraer unas 10 mil piedras, de las cuales se va a obtener una ganancia aproximada  de ¢10 millones por kilo ”, acotó el policía.

Cabe reseñar que un banco ya sea estatal o privado, aproximadamente genera ingresos por unos ¢ 400 millones al mes, por su parte, un búnker deja números por hasta ¢150 millones. 

 

¿SE PUEDE ERRADICAR
ESTA PANDEMIA?

 

Norberto Mujica, subdirector de Antinarcóticos de la Policía Nacional de Colombia, dijo semanas atrás que los grandes carteles habían decidido disminuir sus funciones para propagarse a otros países, tal como ha sucedido con Costa Rica. 

“Al narcotraficante le interesa actualmente asumir roles más pequeños, pero al mismo tiempo acaparar más espacios y terrenos, esto es algo que evidentemente está pasando en América Latina”, dijo Mujica.

Ante estas afirmaciones, Mariano Figueres,  jefe de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS), explicó a DIARIO EXTRA que los componentes geográficos de Costa Rica, su desarrollos socioeconómico, y finalmente su facilidad en cuánto al acceso a las costas, permiten que organizaciones narcotraficantes crezcan con mayor potencial.

“Las organizaciones narco conformadas por costarricenses han sido identificadas por la forma en que se mueven en el mercado, las drogas que decomisan tanto el OIJ como la PCD traen una carátula, y estas son específicas de una agrupación, en esta ocasión por bandas nacionales”, manifestó Figueres.

PERIODISTA:

CRÉDITOS: Fotos: Randall Sandoval y Daniel Esquivel

EMAIL:

Jueves 23 Abril, 2015

HORA: 12:00 AM

Enviar noticia por correo electrónico

SIGUIENTE NOTICIA