La lucha continua por parte de la Escuela de Educación Física y Deporte de la Universidad de Costa Rica donde han emprendido varias campañas junto a sus estudiantes en busca de hacer valer el decreto No. 33532-S que obliga a los gimnasios a contratar profesionales en la materia a y no a cualquier “instructor”.
A El Periódico de Más Venta en Costa Rica han llegado algunas denuncias sobre que en algunos Centros de Acondicionamiento Físico contratan entrenadores personales sin ningún tipo de currículum en el área ni título universitario, situación que mantiene al Icoder y la UCR en pie de lucha.
DIARIO EXTRA conversó con Gerardo Araya, uno de los profesores más capacitados de la Escuela de Educación Física de la UCR quien reconoció que esta es una lucha que han sostenido por años sin ver aún los resultados esperados.
Según Araya, la vigilancia por parte del Ministerio de Salud sigue siendo el talón de Aquiles del decreto, pues es ahí donde a veces se filtran algunos recintos que no cumplen con las condiciones que establece la norma vigente desde el 2007, misma que se publicó en el diario oficial La Gaceta.
¿En qué sienten que se ha fallado?
-El principal problema pasa porque en el Ministerio de Salud se hacen de la vista gorda, y este es el ente que debe fiscalizar que cada uno de los gimnasios cumpla lo estipulado en el manual. Es ahí donde radica el principal punto.
¿Son malas las evaluaciones realizadas?
-Me parece que la evaluación que hacen debe ir siempre de la mano con profesionales de Ciencias del Deporte Humano, carreras que da la UCR y la UNA y que están certificadas, es un proceso que debe aclararse para que sean estos profesionales quienes se involucren junto a otros de distintas áreas y el análisis sea el mejor.
¿Debe modificarse o reforzarse el decreto?
-Creemos que sí, nos parece que hay un tema de las certificaciones en el decreto vigente donde entes certifican pero el Icoder en ocasiones no tiene control y se les sale de las manos. Hay lugares que en un día, una tarde o en seis meses dan una certificación de manera irresponsable, jugando con la salud pública. Eso debe cambiarse.
¿Qué mensaje se le manda a las personas?
-Todos deben tener cuidado, en ocasiones las apariencias engañan, aunque la persona se vea musculosa no se dejen engañar. Muchos por ganar dinero ofrecen sus servicios a bajo costo y eso se denota en los índices de obesidad que presenta el país. Exijan profesionales graduados, verifiquen quién los está entrenando para que no tengan problemas luego.
