La novela en torno al caso Caja-Fishel continúa en los tribunales de Goicoechea donde los acusados, entre ellos el expresidente de la República, Rafael Angel Calderón Fournier y el expresidente ejecutivo de la Caja Costarricense del Seguro Social, Eliseo Vargas, enfrentan una acusación.
La institución reclama $50 millones por daños y perjuicios que sufrió por la compra de equipos médicos, mediante un préstamo finlandés, alegando que fue innecesaria y se compró a sobreprecio, por lo que se había cometido el delito de peculado.
Ileana Balmaceda, expresidenta ejecutiva de la Caja, mediante resolución PE 38301-13 del 8 de julio de 2013 determinó que: “No existe daño patrimonial a la institución”.
William Rodríguez, abogado de la Caja, manifestó a DIARIO EXTRA que “el equipo era innecesario debido a que no se hicieron estudios de factibilidad, la prueba la vamos a demostrar con informe de la auditoría de la Caja y otro del OIJ. Vamos a cobrar el daño moral a persona jurídica para una totalidad de $50 millones”, explicó.
El debate dará inicio este viernes a las 8:30 a.m.., luego de que Eliseo Vargas, quien está preso, alegó que no fue notificado, por lo que el Tribunal confirmó que Vargas fue bien notificado y constató que José Miguel Villalobos era su defensor en lo penal y también lo representaba en la parte civil durante todo el proceso.
A Rafael Angel Calderón Fournier, lo acusan de los delitos de peculado y corrupción agravada, Walter Reiche Fischel; peculado, corrupción agravada, destrucción de documento y falsedad ideológica; Eliseo Vargas García, peculado y corrupción agravada; Olman Valverde Rojas, peculado y corrupción agravada; Marvin Barrantes Vargas, peculado y corrupción agravada; Randall Vargas Pérez, destrucción de documento y falsedad ideológica y Juan Carlos Sánchez Arguedas, peculado y corrupción agravada.