Dos ambientalistas extranjeros vecinos de Talamanca temen ser asesinados y correr la misma suerte que su compañero de mil batallas Jairo Mora (Q.d.D.g), pero involucran a la Municipalidad en lo que pueda ocurrirles.
Se trata del belga Philippe Vangoidseanhon y la estadounidense Carol Meeds, quien al jubilarse del Ministerio del Ambiente de ese país estableció su residencia en Costa Rica para cuidar la naturaleza.
El caso fue denunciado por la Federación Ecologista Costarricense, que lanzó la alerta a nivel nacional e internacional.
Según la acusación y el propio Vangoidseanhon, todo se agravó con un comunicado oficial de la Municipalidad de Talamanca a través de su página oficial, donde atacó, intimidó y censuró a ciudadanos del cantón que han presentado denuncias ambientales.
Literalmente indica: “Ambos tienen toda la libertad de abandonar Talamanca, y preferiblemente el país, puesto que su actitud refleja una permanente incomodidad con nuestras costumbres, valores y modo de vida. Como hemos apuntado, nada los retiene y mucho tienen por hacer en sus respectivos países”.
Asegura que ambos ambientalistas se han encargado de hacer todo tipo de acusaciones ante todas las instituciones y desprestigian Tiquicia en redes sociales.
Ante esto, la Federación Costarricense para la Conservación del Ambiente (Fecon) informó que los activistas viven en el Caribe Sur y han realizado denuncias por daños ambientales ocasionados a los bosques, humedales y vida silvestre de la zona costera de Talamanca, incluyendo el Refugio de Vida Silvestre Gandoca-Manzanillo.
Ante el atropello ya se interpuso un recurso de amparo que busca condenar a Melvin Cordero, alcalde de la Municipalidad de Talamanca, además reparar e indemnizar por los daños y perjuicios ocasionados, una retractación pública y abstenerse de incurrir en el futuro en violaciones similares. Asimismo que se investigue la posible comisión del delito de abuso de autoridad.
Para la Fecon no se puede tolerar la censura del ejercicio de derechos fundamentales de acusar daños causados al ambiente y el principio de igualdad.
“Resulta doblemente reprochable que por razón de su nacionalidad o su trabajo de denuncia se encubra el odio y la xenofobia, llegando al extremo de invitarlos a abandonar el cantón y preferiblemente el país, su hogar desde ya hace varios años”, indicó esa organización en un comunicado de prensa que ayer le dio la vuelta al mundo.
Para esa entidad la rica y diversa zona del Caribe Sur ha sido escenario de varios casos de amenazas de muerte; en el caso de la escritora Ana Cristina Rossi por su trabajo literario y de denuncia por la destrucción del refugio Gandoca Manzanillo o el sufrido por activistas locales en la lucha antipetrolera.
Vangoidseanhon expresó que su gran delito fue denunciar que un regidor estaba realizando una construcción en la zona marítimo terrestre y solicitó que le fuera clausurada, lo que en realidad pasó una y otra vez; pero siempre el propio concejal los rompía irrespetando las leyes establecidas.
“Entonces yo lo denuncié a él y al alcalde ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) para que les quitaran sus credenciales y eso es lo que me están cobrando. Tenemos miedo a que nos pase lo que le pasó a Jairo Mora”, acotó Vangoidseanhon. Cordero confirmó que en forma educada los invitó a marcharse del país ya que de manera irrespetuosa han realizado múltiples denuncias, de las cuales la mayoría se encuentra en la parte judicial. “No tienen sustento y lo que hacen es que tienen paralizado el cantón”, dijo.
Agregó que no lo han notificado de la solicitud del europeo de que les quiten las credenciales a él y a un regidor que violó los sellos de una construcción en la playa.
