Un sol brillante, una tarde calurosa en la que el termómetro marcaba 38º Celsius, familias enteras que aprovechan para realizar las compras el fin de semana, carros y bicicletas eran parte del ambiente que se vivió en Liberia la tarde del sábado cuando de un momento a otro quienes estaban en el centro empezaron a correr gritando y buscando refugio, tras presenciar una balacera de carro a carro.
Se trató de 3 sujetos en un vehículo liviano quienes seguían a uno que manejaba un taxi informal.
La persecución y lluvia de balas fue incesante por todas las calles centrales de Liberia hasta que el taxista entró al parqueo del MaxiPalí ubicado 200 metros al oeste del centro y pensó que quienes lo perseguían no ingresarían por la cantidad de personas que estaban en el lugar a esa hora, pero se equivocó.
A quienes lo querían matar no les importó y lo impactaron en tres ocasiones.
Herido el conductor informal logró salir del estacionamiento y nuevamente ingresó al bulevar principal, donde fue recogido y llevado hasta el Hospital Dr. Enrique Baltodano Briceño, ahí se recupera fuertemente custodiado por policías.
Los enviados a acabar con la vida del limonense de apellido Merchant, que tiene varios meses de vivir el Liberia, se escondieron en el parqueo de un comercio, no obstante de manera pronta y audaz, los encargados de la seguridad cerraron los portones y al verse sin posibilidad de salir, los tres sospechosos saltaron sobre la malla electrosoldada.
Uno, de apellido Barrantes y conocido como “El Gordo Alegría”, fue detenido mientras trataba de darse a la fuga; el segundo, de apellido Rodríguez y colombiano, cayó un día después gracias a los videos de seguridad del establecimiento donde quedaron atrapados y el tercero huyó en un bus.
La Fiscalía de Liberia prepara la solicitud de medidas contra los aprehendidos mientras pide información en San José y Limón sobre las cuatro personas involucradas en un hecho poco común en la Ciudad Blanca.
Algunos testigos, quienes por seguridad pidieron no ser identificados, aseguraron que nunca vieron algo similar y esperan que no se vuelva a presentar, sobre todo porque “este es un lugar tranquilo en el que no pasan las cosas que uno ve a diario en otros lugares como Limón”, expresaron.
Una mujer que estaba muy asustada dijo que “no sabía qué hacer, escuchamos algo que parecía bombetas y cuando vimos a la gente corriendo; uno teme por la vida de uno, pero también por la de mis nietas que andaban con mi hija”.
Este es un caso de aparente ajusticiamiento por tema de drogas, hipótesis que le corresponderá verificar a los investigadores de la Fiscalía y del OIJ de Liberia.
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CRÉDITOS: Fotos: Johnny Méndez
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Martes 24 Febrero, 2015
HORA: 12:00 AM
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