¿Se imagina lo que es tener 30 años de trabajar para la misma institución, que le falten tres meses para pensionarse y que un mes antes de iniciar lecciones se entere que ya no tiene trabajo?
Esta es la situación de Ronny Ugalde, un profesor de música especializado en saxofón del Conservatorio de Castella, quien después de tres décadas de impartir clases en la institución se quedó sin plaza para el próximo curso lectivo, que arrancará el 9 de febrero.
Él y 35 profesores más han sido desplazados de sus espacios en el colegio e imposibilitados de acceder a otro centro educativo, debido a que para el Ministerio de Educación Pública (MEP) no aparecen en la lista de oferentes.
Cintia Crespo, fiscal general del Sindicato Patriótico de la Educación y profesora de teatro en el Castella, dijo a DIARIO EXTRA que entre las personas que están dejando sin empleo se encuentra una embarazada, varios a una o dos cuotas de jubilarse o con más de 10 años de laborar en el Conservatorio.
“Para el Ministerio de Educación Pública (MEP) es más importante un grado académico que la continuidad de muchos compañeros y especialidad que nosotros tengamos. Aquí se han nombrado educadores de solfeo, por ejemplo, y renuncian a los tres meses porque los estudiantes de sétimo saben más que ellos”, comentó Crespo.
La profesora explicó que por la particularidad del Castella su personal docente no puede participar en los concursos para obtener propiedad, por lo que tras varios recursos de amparo el MEP accedió a realizar uno para obtener plazas fijas en la institución en 2012.
“En ese concurso los compañeros no participaron porque no eran docentes sino que tenían especialidades en la disciplina que impartían, pero en uno que se abrió en el 2014 sí lo hicieron y ahora el Ministerio no quiere tomar en cuenta el concurso del año pasado sino el de 2012, en el que no estaban inscritos y por eso están quedando sin plaza”, explicó Crespo.
Para Ugalde, las implicaciones de esto van desde problemas de salud y riesgo de perder una propiedad en la que construiría su casa hasta carencias de tipo económico por no poder acceder a un nombramiento con el MEP.
“También para los estudiantes significaría un retroceso importante, especialmente para los que se gradúan este año de su especialidad artística y de bachillerato, porque todo lo que han aprendido con sus profesores, que tenían su especialidad y conocían el colegio, quedaría en el pasado”, agregó Ugalde.
DIARIO EXTRA intentó conocer la versión del MEP y en la oficina de prensa dijeron que informarían sobre el procedimiento a seguir con estos educadores, sin embargo ayer no lo habían hecho.
Para los educadores la institución requiere personas que no solo sean docentes sino también especialistas en las diferentes disciplinas artísticas.
