Nuevamente las fincas de Bandeco en Sixaola vuelven a ser escenario de conflictos laborales por cuanto, desde hace 10 días, unos 300 trabajadores fueron despedidos y reclaman su reinstalación.
Así lo explicó ayer Aquiles Rivera, del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Pública y Privada Sitepp, quien explicó que esa organización es una de las pocas que tenía una convención colectiva, pero extrañamente, la empresa actuó muy ágil y la denunció. “De inmediato despidió a todos los trabajadores. Un día después contrató a algunos de ellos, y creó un sindicato blanco para firmar una nueva convención colectiva”, comentó.
Explicó que de inmediato denunciaron a la empresa tanto en los tribunales de justicia, como ante el Ministerio de Trabajo por prácticas laborales desleales.
Agregó que desde el 16 de enero se han mantenido pacíficamente en las inmediaciones de la empresa, pero han sido amenazados y agredidos por los capataces de la finca.
“La huelga se mantiene firme, no se produce nada, la empresa está haciendo toda clase de maniobras para confundir a los trabajadores, nos envían emisarios, hay amenazas y lo último que hicieron fue pegar en todo Bribri panfletos en postes y paredes ofreciendo trabajo a todo el que quisiera engancharse de manera abierta”, comentó el sindicalista.
Agregó que el actuar de la empresa es totalmente antisindical. “La empresa viola la convención colectiva en 17 artículos, montó una junta de relaciones laborales paralela y constituyó un sindicato hecho a su medida (blanco) para negociar, cínicamente hoy reconocen que es el sindicato con el que ellos quieren negociar, donde antes se sembraban 1.600 plantas las aumentaron a 2.600 por el mismo precio, comenzaron a hacer combos de diversas tareas por el precio de uno, modificando todas las tarifas a favor de la empresa, desconocieron de manera cínica la convención colectiva y aún así dicen que no saben por qué estamos en huelga”, concluyó el sindicalista.
Por su parte, Luis Enrique Gómez, director de Relaciones Corporativas de Bandeco-Del Monte, en las fincas Sixaola, dice que no están frente a una situación de huelga, sino que los trabajadores que fueron a su criterio legalmente despedidos, se encuentran invadiendo la propiedad, y obstaculizan en forma ilegal para que un gran número de trabajadores puedan llevar a cabo sus labores.
“Se ha suscrito una nueva convención colectiva con el sindicato Untrabasi, quien ostenta ahora la representación colectiva de los trabajadores. La convención colectiva que se había suscrito con Sitepp, venció el pasado 31 de diciembre de 2014, y fue debidamente denunciada”, dijo.
Explicó que ante las acusaciones de que la empresa creó ese sindicato, ellos son muy respetuosos de la voluntad de los trabajadores de escoger libremente como se organizan.
