Cosas Veredes

Hoy iniciamos una serie de columnas dedicadas al tema de conocimientos, afirmaciones o datos que suelen aceptarse a nivel popular (e incluso a niveles académicos más restringidos, que se supone tendrían que estar más enterados… digo yo) y resulta que no son del todo ciertas, o falsas del todo.

Quizá algunas les resulten sorprendentes. Confieso que a mí varias de ellas sí que lo hicieron. Veamos la primera:

“Los meteoritos se calientan por la fricción del aire debido a la velocidad con que caen”: esa es una de las afirmaciones que yo mismo he sustentado durante casi toda mi vida consciente. Parece el proceso más lógico: el aire que encuentra a su paso se “raspa” con las paredes del meteorito, fricción que lo calienta tanto que lo pone al rojo blanco. ¿Cierto?

Pues no. Resulta que el asunto es más complicado. Lo que ocurre más bien es que el meteoro comprime tanto el aire frente a su paso que este se calienta hasta el grado de ponerse incandescente, transfiriendo parte de ese intenso calor a la superficie del meteorito en sí.

Casualmente ese mismo proceso físico es el que se aprovecha en los motores diésel: el aire es comprimido en el cilindro por el pistón, por lo que sus moléculas son obligadas a chocar más frecuentemente debido a su cercanía mucho mayor, incrementando la velocidad de su vibración… que de eso se trata el aumento de temperatura. Y cuando la comprensión llega a su punto máximo se inyecta el combustible para que entre en ignición.

Un mito derivado de la creencia anterior es que los meteoritos al caer en tierra son muy calientes. Es cierto que en su superficie, en los primeros momentos, puede que algunos conserven algún calor residual, pero casi siempre es lo contrario: lo cierto es que poco antes de chocar con tierra (aquí sí gracias a la fricción del aire) su velocidad ha bajado lo suficiente como para darle tiempo de perder las capas incandescentes, pero no como para volverse a encender (de todos modos la velocidad ya no es lo bastante). En cambio, debido a que en su interior conserva las tremendamente bajas temperaturas que mantuvo en el espacio durante quizá millones de años, suele ocurrir que al encontrar el meteorito esté tan frío que incluso haya formado hielo en su superficie.

Continuamos mañana.

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Martes 02 Diciembre, 2014

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Por: Ronny Ugarte.