Un hombre identificado por las autoridades como Eduardo Antonio Jirón falleció arrollado por un vehículo guiado por un sujeto de apellido Salazar, quien al parecer viajaba a gran velocidad y en estado de ebriedad por Punto Cuatro de Herradura, Garabito.
La víctima mortal era un panadero de nacionalidad nicaragüense y 37 años, quien había sido detenido minutos antes tras protagonizar un accidente con otro carro, por lo que el oficial de tránsito Gustavo Taylor llegó a atender la colisión.
Posteriormente le solicitó los documentos al extranjero y le ordenó que se bajara del auto, fue cuando se percató que estaba ebrio, por lo que le aplicó la prueba de alcohol, que arrojó 1,05 gramos de alcohol en su sangre.
Al termina de confeccionar el parte, el oficial de la Fuerza Pública Mainor López esposa a Jirón y cuando estaban listos para montarlo a la perrera y trasladarlo a la fiscalía, donde iba a ser interrogado por lo sucedido, surgió la desgracia.
En el lugar del choque entre un pick up y un liviano se colocaron conos reflectivos y ambas patrullas tenían las luces encendidas, lo que dejaba ver a los conductores que se aproximaban que debían manejar con precaución, pero uno de ellos no lo hizo así.
LUZ ENTRE LA OSCURIDAD
En determinado momento se vieron unas luces en medio de la oscuridad que hacían zigzag y se aproximaban muy rápido, al sitio de la colisión, por lo que Taylor le hizo la señal de alto al Mazda de carga ancha.
Como si no le importara, Salazar supuestamente siguió su camino, llevándoselo en banda junto a López y Jirón, quien estaba esposado. Los tres sufrieron heridas de gravedad tras ser lanzados varios metros.
Como si eso fuera poco, la persona involucrada se bajó del carro y siguió su camino, pero a 500 metros del brutal impacto fue detenido y le realizaron la alcoholemia, que arrojó 0.93.
Otros oficiales llegaron a rescatar a sus compañeros oficiales y atender el incidente, quienes confirmaron que Salazar andaba pasado de tragos.
Tras el bombazo ambos funcionarios resultaron heridos, López con una fractura expuesta en la pierna derecha y múltiples golpes en todo el cuerpo, lo que ameritó el traslado inmediato al Hospital San Rafael de Alajuela, donde fue sometido a una operación.
MUERTE AL VOLANTE
Mario Calderón, director de la Policía de Tránsito, en conversación con DIARIO EXTRA lamentó lo sucedido con los dos oficiales, quienes únicamente hacían su trabajo.
“Seguimos insistiendo en que si toma licor no le dé el volante a la muerte. Existen tres actores en cada accidente: el chofer, el peatón y el policía que atiende el incidente, por lo que hacemos un llamado para que hagan conciencia.
El año pasado cerramos con 288 personas que perdieron la vida, mientras que este 2014 la cifra igualó a falta de 57 días para cerrar la estadística”, explicó.
Taylor sufrió una fractura en la clavícula, lo inmovilizaron, le aplicaron medicamentos para el dolor, ya que era insoportable, y lo trasladaron a la Clínica de Jacó, donde lo trataron.
López es vecino de San Carlos y se desempeña en la delegación de Garabito desde el 16 de junio del 2011, mientras que Taylor labora en Jacó.
El cuerpo de Jirón fue levantado por los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en el centro médico y lo trasladaron a la morgue, donde le practicaron la autopsia.
El accidente está en investigación judicial para sentar las responsabilidades porque dejó un muerto, dos oficiales heridos y cuantiosos daños materiales.
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CRÉDITOS: Fotos: Yahaira Valle, corresponsal
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Martes 04 Noviembre, 2014
HORA: 12:00 AM
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