Una consultoría en comunicación a cargo del exasesor del presidente Luis Guillermo Solís, Iván Barrantes, se perfilaba como la eventual primera contratación que haría el mandatario con un disponible de ¢87 millones para ese tipo de gastos en Casa Presidencial.
La partida se la dejó presupuestada la exmandataria Laura Chinchilla, quien pagó por concepto de asesorías en el Ministerio de la Presidencia ¢508 millones, alrededor de c70 millones más que su antecesor el expresidente Óscar Arias.
Solís se vio obligado a echar marcha atrás la posible contratación de Barrantes, después de que hasta el fundador del Partido Acción Ciudadana (PAC) Ottón Solís se lo solicitara, argumentando que podría desatarse un conflicto de intereses ya que Barrantes en paralelo asesora empresas privadas.
Los rojiamarillos se han caracterizado por cuestionar y tachar de despilfarros el uso del mecanismo de asesorías en anteriores administraciones. Incluso en su código de ética establecen:
“Las personas que ocupen puestos públicos como resultado de nominaciones hechas por el Partido Acción Ciudadana se opondrán a excesos a la hora de nombrar asesores/as en las instituciones que presten sus servicios. Las personas del grupo asesor deben ser moralmente solventes y profesionalmente capacitadas”.
¿CÓMO LAS USARON?
En el primer año de mando de Chinchilla, gastó solo en contratación de consultores en Casa Presidencial ¢38 millones, su pico en gastos de este tipo lo tuvo justo en el último año de gestión, en el 2013, cuando dispuso de ¢198 millones.
Entre las personas que recibieron ese dinero, se encuentran: Ricardo Monge González, Adolfo Rodríguez Herrera, Velia Govaere Vicarioll, y Marco Vásquez Jiménez, según datos suministrados por la oficina de prensa del Ministerio de la Presidencia.
En declaraciones a DIARIO EXTRA, cuestionado por el uso de asesorías, el ministro de la Presidencia, Melvin Jiménez, señaló que todos los Ministerios tienen la potestad de echar mano de asesores, siempre y cuando, no se torne en exceso.
Jiménez dio esas afirmaciones, a pesar de que al arrancar Gobierno criticó los pagos en asesorías en comunicación específicamente, en la administración Chinchilla Miranda.
