México. (EFE) - Crear vida a partir de la muerte es el objetivo de una empresa en México, la cual ofrece servicios fúnebres marinos para que las cenizas del fallecido descansen flotando en una urna biodegradable o reposen eternamente en un arrecife en el fondo de las aguas saladas.
A los dueños de Inmemoriam no les gustan las palabras fúnebres, ni cripta, ni tumba, ni cementerio, prefieren llamar a los funerales "homenaje a la vida" y "perlas" a las bolas en que se meten las cenizas de los fallecidos.
Todo surgió cuando la madre de uno de los socios, Eduardo Patiño, le pidió que cuando muriera echara sus restos al mar y él no encontró ninguna forma de hacerlo de un modo elegante y simbólico.
Fue entonces cuando se les ocurrió crear su empresa, inspirada en una estadounidense pero agregándole la sensibilidad latina.
Una urna biodegradable puede costar unos $2.315 y entre $3.858 y $5.400 reposar en un arrecife marino.
Eso sí, realizan con mucho esmero y respeto cada servicio, ya que les costó "mucho trabajo por todo el tema de los permisos", que fueron acompañados de numerosos estudios sobre el impacto ambiental y las especies que ahí viven.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Lunes 28 Julio, 2014
HORA: 12:00 AM
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