Las ideas de los diputados de otorgarle la ciudadanía honorífica a Jorge Luis Pinto, además de realizar un homenaje a la Sele están jaladas del pelo.
La bronca que este jueves destapó el técnico Pinto y todo lo que se dice de uno y otro lado le restaron fuerza a las iniciativas que nacieron en la Asamblea Legislativa al calor de los resultados mundialistas.
Darle la ciudadanía de honor al timonel colombiano fue del legislador de la Unidad Social Cristiana (PUSC) Rafael Ortiz, expresidente de la Liga Deportiva Alajuelense. Mientras que el directorio legislativo propuso recibir en el plenario a los jugadores para homenajearlos.
NUBLADOS DEL DÍA
Consultado sobre el tema, Ortiz dijo que el proyecto de la ciudadanía de Pinto necesita al menos 38 votos para que pase al primer lugar de la agenda y tratar de debatirlo, pero no contaría con el apoyo necesario.
“Algunos no están de acuerdo, creo que ahora hay que darle un chance para que las cosas se normalicen para ver qué podemos hacer”, dijo el legislador, quien como buen fanático del deporte más popular en nuestro país lamentó lo que pasa en la Federación de Fútbol.
“Se puso complicado, lo que indica la prudencia es que hay que dar un tiempo para que se acomoden las aguas, como dijeron nuestros abuelos, que se aclaren los nublados del día”, subrayó.
Desde un inicio el legislador Ronny Monge del Partido Liberación Nacional se opuso a esta idea, recordó que ese tipo de proyectos no se debieron ver al calor del momento e insistió que según la Constitución ese honor solo se lo merece quien haya dado servicios notables al país.
“De mi parte mantengo mi posición, fue algo que surgió por la pasión del Mundial. En la Asamblea debemos tomarnos nuestro tiempo para no actuar por impulsos y trabajar por lo que realmente nos va a beneficiar”, detalló.
¿EL HOMENAJE?
Respecto al homenaje que se le pretendía realizar a los seleccionados, tanto Ortiz como Monge reconocieron que está mucho más difícil debido a que la mayoría de los jugadores se encuentra en otros países con sus clubes.
Entre pasillos del Primer Poder de la República se dice que el tema del homenaje no fue manejado de la manera más correcta por el directorio. Se rumora que en algún momento se pretendió que la Sele fuera el día después de su llegada a suelo nacional sin coordinar ni conocer la agenda previa, que ya la Federación tenía establecida.
También se dice que se procedió con la compra de medallas para los jugadores y ahora que no van a ir no se sabe en qué las van a utilizar.
