Abrazos, muchos abrazos, eso es lo que Óscar López regala en Navidad, al menos así lo aseguró a El Periódico de Más Venta en Costa Rica el candidato presidencial del Partido de Accesibilidad sin Exclusión (PASE). Él dijo creer en el poder “místico y espiritual” que conlleva este contacto tan humano.
López aseguró que en estas épocas no niega un buen tamal y admitió con cierta tristeza que el regalo navideño que siempre quiso y no le dieron fue un viaje a Acapulco.
¿Cuál es su mejor recuerdo de la Navidad?
-La cercanía con mi abuelita, tenerla siempre cerca de mi tratando de hacerme la vida más fácil y más llevadera. Desde mi niñez, la discapacidad era muy dura para mí, tengo lindos recuerdos de mi abuelita tratando de hacerme la vida feliz y agradable.
¿Cuál sería el mejor regalo que les podría dar a los ticos en esta navidad?
-Decirle siempre la verdad al costarricense, no mentirle, es el mejor regalo que puedo darle. Tienen aquí una persona que no dice mentiras y siempre es sincera.
¿Cuál fue el regalo que siempre quiso en navidad y nunca le dieron?
-Conocer Acapulco. Yo de niño escuchaba al Chavo del 8, allá por los 70s, y cuando él anhelaba ir a Acapulco. Así, yo siempre decía que quería conocer Acapulco y mi papá me “cuentiaba” de que me iba a llevar. Por seguir al Chavo siempre tuve ese anhelo y todavía no conozco ese lugar.
¿Qué es lo que más le gusta comer en la Navidad?
-El infaltable tamal, y por supuesto las manzanas y las uvas. Recomiendo que se coman las semillas de las manzanas y uvas, son la mejor quimioterapia para atacar el cáncer, aprovechen esta Navidad para comérselas.
¿Cómo va a pasar estas fechas?
-Lo que hago es repartir abrazos a todo mundo, me gusta regalarlos. Creo mucho en el poder místico y espiritual de estos, y aprovecho para enviar un abrazo a los lectores de DIARIO EXTRA.