Según Creo

Se alega que la distribución de la riqueza no resolvería el problema de la pobreza, porque de todos modos no alcanzaría para todos, pero ese no es el punto. El punto es que habiendo tanta necesidad no hay justificación para que a 400 gringos les quede la mitad de lo que producen en ese país los otros 380 millones de personas. Es muy anormal. Es inmoral.

Pero hay otro aspecto peor: decirle al 99% de la población que la moto, el Hyundai, y el BMW para ellos todavía no se han producido, pero que se van a producir si colaboran para que el sistema sobreviva.

Este último engaño es peor, porque el mundo no puede seguir produciendo así para todos: se acaban los recursos, se contamina el ambiente, se agrava la desigualdad de la distribución, y hay una crisis económica que lo refleja.

La humanidad tiene que admitir que el estándar de vida que se nos ha prometido a todos es imposible. Tenemos que moderar el consumo, y hay que disminuir la población.

Pero sobre todo, tenemos que encontrar otra manera de vivir. Una que no tenga por lema “competir o morir”, sino amar al prójimo y respetar a las otras especies con que compartimos el planeta. Sabemos bien lo que hay que hacer, pero no nos gusta. Preferimos la moto, el Hyundai, y el BMW: Brrrrum, Brrrrum.

Veámoslo de otra manera. ¿Le parece a usted bien que Bill Gates, Carlos Slim, o Steve Jobs tengan fortunas de decenas de miles de millones de dólares cuando a muchos de sus paisanos se les echa a la calle porque no pueden pagar la hipoteca de su casa?

Hay gente que lo encuentra bien. Los defensores de ese sistema lo consideran justo, y son incapaces de ver que es insostenible; se oponen a cualquier cambio. Dicen que esas fortunas se han acumulado por mérito, mientras que son unos irresponsables quienes han perdido su casa por deudas que no pueden pagar: los del 99%.

Se puede decir que la humanidad se encuentra dividida irremediablemente entre los ricos y los pobres. Solo que esa es una división insostenible por la proporción.

Algo tiene que pasar si la gente no solo no consigue empleo, y para poder enfrentar el costo de la vida tendrían que tener dos o más empleos. Pero en cambio los grandes bancos “salvatados” con el dinero de los contribuyentes reportan unas ganancias extraordinarias.

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Martes 17 Septiembre, 2013

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Por: José Calvo