“El amor es fuerte como la muerte; los celos son crueles como la tumba”, así de claro lo dejó escrito el rey Salomón. Estas palabras al parecer se hicieron realidad tras el asesinato de Rafael Alberto Murillo Rubí, de 49 años y exalcalde de Puriscal.
Tal como lo informó DIARIO EXTRA en su edición de ayer, el atroz crimen de este hombre, quien se desempañaba como docente, orienta a los investigadores que se trataría de problemas sentimentales, pues a la víctima lo único que le quitaron fue la vida y no se llevaron nada de valor de la vivienda.
SANGRE CANTARÁ ASESINO
Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), forenses del Complejo de Ciencias Forenses y oficiales de la sección de Inspecciones Oculares recopilaron las primeras pesquisas.
Aparentemente hallaron dos tipos de sangre, sin embargo están a la espera de los resultados de los exámenes para determinar si en efecto se trata de dos tipos de ADN y así llegarle al asesino.
Las huellas de los zapatos sobre el piso de cerámica también forman parte de las evidencias que dejó el sospechoso.
Francisco Segura, director del OIJ, aseguró que cuentan con suficientes elementos para ir trabajando en este homicidio.
LE DAN ADIÓS
Vera Alvarado, de la Dirección Regional del Ministerio de Educación Pública y exjefa de la víctima, comentó que Murillo tenía más de 20 años de ser docente y este año comenzó como supervisor en Turrubares.
“En julio asumió la dirección en San Felipe de Alajuelita, mientras este año se le ascendió como supervisor de centros educativos. Era una persona amable, respetuosa y jamás nos comentó de enemistades”, declaró.
Lo dicho por la funcionaria fue repetido por los demás compañeros del occiso.
El cadáver de “Pepe”, como le decían de cariño a Rafael Alberto, fue velado en casa de una hermana y será enterrado hoy en el cementerio de Puriscal.
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CRÉDITOS: Fotos: Randall Sandoval y Francisco Obando
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Sábado 17 Agosto, 2013
HORA: 12:00 AM
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