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Sucesos

Dos amigos desangran exalcalde con puñal

  • Mucha sangre hallaron los agentes judiciales dentro de la vivienda del exalcalde

  • Consternación los parientes veían el cuerpo que llevaban dentro de una bolsa plástica al Complejo de Ciencias Forenses

  • Familiares se cuestionaban por qué asesinaron a “Pepe” si al parecer no tenía problemas con nadie

Paredes manchadas de sangre, huellas de tenis en el piso de cerámica y señales de que hubo un forcejeo antes de la muerte. Esa es la escena del crimen en la que trabajan agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Puriscal tras hallar sin vida al exalcalde Rafael Alberto Murillo Rubí, de 49 años. 

 

La cochera, así como la sala de la vivienda de la víctima, ubicada en Bajo Los Murillo, fueron parte del set que utilizaron los asesinos para torturarlo y ocasionarle un doloroso fallecimiento. Así lo señalan las primeras pesquisas de los judiciales. 

 

 

HERMANA Y POLICÍA LO HALLAN DETRÁS DE PUERTA

 

Faltaban menos de 10 minutos para las 6 a.m. de ayer cuando Flor Murillo recibió la llamada de su hermana Yorleny, quien le decía estar extrañada de que Rafael Alberto no le contestara, pues decidieron aprovechar el día feriado para hacer mandados.

 

“Ellos habían planeado ir a Alajuela. Mi hermana me dijo que le tocara la puerta y que le recordara llevar una corbata que le habían pedido, pero al llegar al portón vi mucha sangre, me asusté, grité y algo me imposibilitaba entrar. Me devolví corriendo”, narró Flor. 

 

Greddy Quesada, quien labora como policía municipal en San José, se encontraba en su casa, a dos de la del exalcalde, y escuchó los desgarradores gritos de Flor. El joven corrió para ver qué ocurría y lamentablemente confirmó que “Pepe” -como le decían a la víctima- estaba sin vida.

 

El cadáver de Murillo quedó detrás de la puerta de la sala, boca arriba y cubierto de sangre. Socorristas determinaron que estaba rígido, por lo que presumen que murió hacía más de 8 horas. 

 

El cuerpo tenía cortes muy finos, mientras que otros eran profundos, por eso los agentes tratan de determinar si lo atacaron con un cuchillo de cocina u otra arma. 

 

Preliminarmente le hallaron heridas de puñal cerca del corazón (al parecer le causó la muerte), en la cabeza y otra en el costado izquierdo. 

 

En la casa había dos sillas tiradas, así como la mesa, además de muchas gotas de sangre, por lo que se presume que el cuerpo fue arrastrado dentro del inmueble.

 

Víctor Matamoros, oficial de la Fuerza Pública, dijo que se trató de un homicidio. “Determinar el móvil del crimen llevará mucho trabajo para los del OIJ, quienes ya trabajan en el caso, pues este lugareño no tenía problemas y más bien muchos vecinos lo querían. Pareciera que no robaron pero sí había desorden”, indicó.

 

 

ASESINOS SERÍAN DE LA ZONA

 

Aunque los asesinos aún no han sido capturados, agentes judiciales presumen que se trataría de dos amigos del mismo pueblo debido a la manera en que lo abordaron. 

 

Pareciera que “Pepe” fue atacado por la espalda, mientras cerraba el portón; no obstante, no tuvo tiempo ni de poner el candado. 

 

La última vez que vieron con vida a Murillo fue en compañía de unos amigos en el parque de Puriscal, el miércoles a las 9 p.m. Agentes tratan determinar si algunas de las personas que lo acompañaban están involucradas, ya sea que viajaran en el automóvil o si por el contrario lo esperaban dentro de la casa.

 

El móvil, según las primeras indagaciones, pareciera ser un pleito sentimental, no obstante las autoridades aún tratan de determinar las causas del homicidio.

 

 

SEGUNDO ATAQUE 

 

En cuestión de minutos la familia llegó al lugar, mientras la Fuerza Pública acordonaba la escena. Lágrimas e interrogantes se apoderaban de los parientes, quienes decían desconocer las razones del crimen, pues Murillo nunca les comentó de problemas o amenazas. Murmuraron que hace dos años “Pepe” fue víctima de unos hampones que lo maniataron y golpearon dentro de la casa, en esa ocasión le robaron el Mitsubishi Montero placa 835908. Luego de seguimientos Murillo recuperó el automotor en Alajuelita, San José. Sin embargo en este segundo ataque aparentemente no le robaron nada y la intención era darle muerte.

 

 

LUCHABA POR OTRA ALCALDÍA 

 

Murillo, quien se desempeñaba como profesor, laboraba en el Colegio Técnico Profesional de Turrubares, dijeron sus parientes. 

 

Además fue electo alcalde por el cantón de Puriscal de julio de 2006 a febrero de 2007, cuando el alcalde de ese momento Carlos Araya Jiménez renunció.

 

Trabajaba para el Partido Unidad Social Cristiana y según trascendió luchaba por obtener su segunda alcaldía.

PERIODISTA:

CRÉDITOS: Fotos: Francisco Obando

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Viernes 16 Agosto, 2013

HORA: 12:00 AM

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