Este 1º de mayo

Opinión

Este 1ᵒ de mayo es crucial. El país sabe de dónde viene, con sus fortalezas y debilidades. Lo que no está claro es para dónde vamos.

Las insólitas declaraciones del vicepresidente Brunner, como coordinador del Sector Económico, sobre la excesiva apreciación del colón frente al dólar, diciéndoles a los productores agrícolas y exportadores nacionales y a los empresarios de turismo que deben “cambiar de actividad” y prepararse para las futuras “vacas flacas”, obliga a que el Poder Ejecutivo exprese y reconfirme con transparencia si ese será el rumbo del Gobierno los próximos dos años.

El vicepresidente Brunner planteó, en la forma más dura, directa y a la yugular, las diferencias de fondo y las consecuencias previsibles entre dos modelos de desarrollo económico para Costa Rica: el modelo neoliberal economicista y el modelo desarrollista y solidario. Esa franqueza debemos agradecérsela.

He escrito muchas veces que el actual modelo económico y social desarrollista y solidario que adoptamos en los 80 viene haciendo aguas desde hace más de dos décadas. Costa Rica necesita reformas estructurales. Pero una cosa es la reforma del modelo prevaleciente y otra cosa es su completa sustitución por un modelo neoliberal y economicista como el que propone el vicepresidente Brunner, proponiendo desmontar el aparato productivo privado nacional, sea grande o pequeño, y que los cafetaleros, los bananeros, los piñeros, los arroceros, los de vegetales y los empresarios del turismo cambien de actividad económica. Así no más... ¡Cómo si tal cosa!

Esa propuesta significa liquidar al sector privado productivo nacional, empleador y asegurador social de mucho más de 500.000 trabajadores.

Una cosa es ser reformista, defender y proponer los ajustes que necesita con urgencia el modelo actual de desarrollo y, sobre todo, la estructura funcional del Estado costarricense y sus relaciones con el sector privado productivo y exportador, generador primario de la riqueza y las reservas monetarias nacionales y el mayor empleador del país y, otra cosa diferente es sustituirlo por un modelo neoliberal y economicista al peor estilo de los “Chicago Boys” chilenos de los años 70, 80 y 90 del siglo pasado, como es también la tesis actual del Banco Central, en su férrea posición doctrinaria y defensa del tipo de cambio actual.

Son dos posiciones diametralmente distintas y dos modelos de desarrollo en las antípodas que, ni con la Ruta de los Microchips y la exportación de productos médicos desde Zonas Francas, pueden sustituirse el uno por el otro, cuando deberían complementarse y profundizarse en ambas direcciones.

Pero si esa es la posición oficial... esta es una definición impostergable que se debería aclarar ante el país en el Informe Presidencial del 1ᵒ de mayo. De ser así, eso significaría la ruina del aparato productivo privado nacional y la desaparición de nuestro Estado Social de Derecho. ¿Es eso lo que queremos?

¿Y usted qué opina?

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Jueves 18 Abril, 2024

HORA: 12:00 AM

CRÉDITOS: Fernando Berrocal