Un bebé de 1 año y 6 meses ingresó en condición delicada al Hospital Nacional de Niños (HNN) luego de ingerir desengrasante accidentalmente. La emergencia se reportó en Liberia, Guanacaste.
De acuerdo con la información preliminar de las autoridades, al parecer el pequeño estaba en su casa cuando por razones que no están claras tomó un envase que contenía un liquido que sirve para remover aceite y limpiar motores.
Al percatarse de lo ocurrido, los familiares del infante llamaron al servicio de emergencias para solicitar ayuda. Rápidamente los cuerpos de socorro trasladaron al pequeño hasta el Hospital Dr. Enrique Baltodano, en Liberia.
Los especialistas que lo atendieron decidieron trasladarlo de emergencia al HNN, por lo que solicitaron apoyo a los oficiales de la Policía Municipal de Escazú para que escoltaran la ambulancia del servicio privado que se encargaría del recorrido hasta la capital.
Johnny Miranda Barquero, oficial de la Policía Municipal de Escazú, explicó que al recibir la alerta les indicaron que la condición el menor era grave e incluso tenía problemas de oxigenación, por lo que era necesario que el traslado se hiciera en el menor tiempo posible.
“Lo que nos dicen los compañeros es que el niño toma un líquido para remover aceite y limpiar motores. Es un líquido muy fuerte, el cual le hizo mucho daño. Lo trasladan intubado desde el hospital de Liberia hasta el de Niños con personal médico en la unidad”, detalló.
Los especialistas del centro médico capitalino procedieron a atender al menor para darle los tratamientos necesarios y que se recupere.
ATRASO
De acuerdo con Miranda, el traslado del bebé tuvo un retraso de varios minutos porque en el camino se encontraron con una colisión de dos cabezales. Inicialmente los uniformados debían topar la unidad en Orotina, pero ante la demora se movilizaron hasta Caballo Blanco para desde ahí escoltar la ambulancia.
Durante el trayecto para encontrarse con los paramédicos tuvieron que detenerse en varias ocasiones para comunicarse vía telefónica con ellos, pues necesitaban determinar por dónde venían. Esto molestó a una conductora.
“A una señora no le gustó, tanto así que cuando la volvimos a pasar nos tiró el carro encima con intenciones de sacarnos en un puente porque ella decía que nosotros íbamos jugando con las sirenas y era que nos íbamos comunicando con la ambulancia para ver exactamente por dónde venían. Gracias a Dios no pasó nada y llevamos la unidad al hospital. El niño llegó estable, que es lo primordial”, expresó.
Agregó que pese al atraso el traslado fue bastante rápido porque la mayoría de los conductores cedieron el espacio para transitar.
“No estamos jugando, es realmente una emergencia lo que traemos. Si traemos los dispositivos, que la gente nos entienda que no estamos jugando, si los ponemos es porque estamos trabajando y son vidas que están en peligro”, concluyó.
PERIODISTA: Mónica Matarrita Mora
CRÉDITOS: Fotos: David Barrantes
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Viernes 28 Febrero, 2020
HORA: 12:00 AM
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