En cuestión de segundos y con una ráfaga de 30 balazos acabaron con la vida de dos hombres que estaban en una casa que funciona como búnker en Cieneguita de Limón a pocos metros de una iglesia. A los fusilados les pegaron 15 tiros en total.
El ataque ocurrió a las 10:30 p.m. del domingo y hasta ayer en la delegación del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) solo tenían identificado a uno de los occisos.
Se trata de Andrés Martínez Castillo, de 24 años, vecino de La Colina, a quien lo impactaron tres plomazos, dos en el lado derecho del cuello y el tercero en la región pectoral.
Sobre el otro fallecido detallaron que no portaba ningún tipo de documentación, por lo cual no pudieron dar con su nombre.
Para tratar de dar con familiares que puedan identificarlo, Álvaro González, jefe del OIJ en Limón, dijo que esta persona tiene un tatuaje en el lado izquierdo del abdomen que dice Lucía, mide aproximadamente 1,80 metros, es de piel morena, vestía un short y camisa sport.
En el caso de este hombre los pistoleros lo ultimaron con 12 balazos, seis los recibió en el pecho y la otra mitad en la espalda.
BOMBETAS
El ataque contra estos sujetos fue tan rápido que los vecinos no pudieron observar en qué llegaron los asesinos y tampoco en qué se retiraron.
Incluso, al escuchar el tiroteo muchos confundieron los estruendos con bombetas, pues por las celebraciones de fin de año es común que los lugareños utilicen fuegos artificiales en esa comunidad.
“No contamos en qué llegaron o en qué se desplazaron las personas que cometieron el homicidio, ya que no se cuenta con prueba documental, testimonial o visual que nos lo indique”, comentó González.
No fue hasta que una persona pasó cerca de la vivienda y observó la sangrienta escena.
Según detalló González, cuando los pistoleros llegaron al inmueble al primero que se encontraron fue al hombre que siguen sin identificar. Él estaba en el corredor del búnker.
Ahí sin mediar palabra alguna uno de los homicidas sacó un arma de fuego y le mandó los 12 plomazos que lo hicieron caer al piso donde murió desangrado.
Posteriormente, los agresores ingresaron al inmueble y tras buscar en todos los aposentos a Martínez lo encontraron en el área de la cocina.
Ahí sin piedad alguna le propinaron los tres balazos que le arrebataron la vida.
Una vez que asesinaron a sus objetivos, los sospechosos se dieron a la fuga.
Los primeros en llegar a la escena fueron los paramédicos de Cruz Roja, a quienes alertó el servicio de emergencias debido al llamado de los lugareños creyendo que los muchachos seguían con vida.
Sin embargo, una vez en el sitio los cruzrojistas confirmaron que ya no había nada que hacer y entregaron la escena a los oficiales de Fuerza Pública para que acordonaran el inmueble.
AJUSTE DE CUENTAS
Tiempo después a la escena se presentó el equipo de investigación de la policía judicial, así como los agentes de la Sección de Inspecciones Oculares y Recolección de Indicios.
De acuerdo con González, desde el OIJ se tiene claro que el doble homicidio responde a un ajuste de cuentas porque el mortal ataque fue rápido, no obstante conforme avancen las pesquisas podrán determinar si se trató de un tema relacionado con drogas o de tipo personal.
Agregó que todavía tampoco tienen claro a qué se dedicaban los ahora occisos, ni sus perfiles y se desconoce si alguno de los dos vivía en el búnker desde hace mucho tiempo o si solo estaban de paso.
Durante la recolección los agentes judiciales encontraron 30 indicios balísticos dentro y fuera de la vivienda, así como municiones sin percutir y balas deformadas. Todo los remitieron al Complejo de Ciencias Forenses para que los analicen.
Asimismo, los cadáveres de estos dos hombres los remitieron a la morgue para que les hagan la autopsia.
De acuerdo con datos del OIJ, en lo que va del año en la provincia de Limón se reportan 102 homicidios, siendo junio y noviembre los meses más violentos con 15 y 13 asesinatos, respectivamente.
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CRÉDITOS: Fotos: Manuel Zamora, corresponsal
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Martes 10 Diciembre, 2019
HORA: 12:00 AM
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