Querer repetir una agresión doméstica le costó la vida a Nolvin Josué Talavera Castro, de 24 años, luego de que un hombre saliera en defensa de su esposa y la nieta, a las cuales el hoy occiso había agredido en la primera parada de La Carpio en Uruca.
Este sujeto murió en el Hospital México luego de ser trasladado minutos después de que lo agredieran, ya que quienes lo socorrieron no esperaron la atención por parte de la Cruz Roja y lo movilizaron en un vehículo particular.
El detalle del caso lo explicó la Policía Judicial, quien relató la cronología de los hechos luego de ir a realizar las respectivas pesquisas y el levantamiento del cuerpo.
Walter Espinoza, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), aseguró que el móvil del crimen obedeció a un tema meramente personal, pero tuvo un antecedente el 6 de agosto.
“Para tener una noción de lo que ronda el homicidio debemos mencionar que el martes el occiso es denunciado vía telefónica por parte de su pareja sentimental, con quien tenían tres hijos por agresión doméstica.
La Fuerza Pública atiende el caso y le piden a la mujer que formule la denuncia o que firme algún documento para que fuera trasladado a los tribunales, pero esta afirma que solo quiere que se lo lleven”, narró.
Al no haber ninguna demanda o acusación en contra de Talavera Castro por parte de la mujer de apellidos Vargas Vargas, este hombre se encontraba en libertad, por lo que al siguiente día, es decir el miércoles 7 de agosto, se volvió a presentar a la casa y también se presentaron problemas con su esposa.
A raíz de eso, nuevamente Nolvin quiso agredir a la mujer, pero no contaba con que su abuela iba a interferir para evitar que los golpes llegaran hasta su cuerpo.
“La adulta mayor se interpone y evita que la agredan, pero es esa mujer la que recibe la golpiza por parte de Talavera Castro, lo que provoca que el compañero sentimental de la señora reaccione presentándose al sitio y con un arma blanca lance una estocada a la parte izquierda del tórax del sujeto y le provoque la muerte”, agregó.
SE ENTREGÓ
Luego de caer en razón, el agresor de 61 años, de apellidos Sánchez Madrigal, procedió a entregarse a la policía para ser sometido ante las autoridades correspondientes.
Este señor tiene una discapacidad en una pierna, pero eso no fue impedimento para que saliera en defensa de ambas mujeres y tomara la justicia por sus manos.
Por ahora serán los agentes judiciales quienes determinen si la acción se generó en legítima defensa en favor de ambas damas.
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CRÉDITOS: Fotos: Hebert Arley
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Viernes 09 Agosto, 2019
HORA: 12:00 AM
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