Después de que profesionales en psicología señalaran que cerca de un 80% de la atención de adolescentes por internamiento psiquiátrico se debe al bullying, en el Ministerio de Educación Pública (MEP) indicaron que en el primer trimestre de 2019 suman 41 casos atendidos.
En la Contraloría de Derechos Estudiantiles informaron que en 2018 atendieron 140 casos, 79 en 2017 y 76 en 2016, mientras que el año con más reportes de agresiones en centros educativos fue 2015 con 248.
DIARIO EXTRA consultó si atendían los casos en forma satisfactoria con las respectivas sanciones. Al respecto Rocío Solís, jefa de la Contraloría de Derechos Estudiantiles, informó que efectivamente, todos los casos se resuelven mediante la intervención integral entre el centro educativo, familia y estudiantes.
Explicó que además se les da seguimiento a los padres de familia para que se cumplan los acuerdos tomados en el proceso de solución.
“Sobre las sanciones, depende de cada caso. A algunos se les aplica el reglamento de evaluación de los aprendizajes y otros van a la Fiscalía Penal Juvenil”, manifestó.
“Pero sobre todo se refiere a las medidas que deben tomar los centros educativos en la prevención y la convivencia pacífica, así como el análisis de la aplicación del protocolo”, añadió.
Solís fue clara y directa al asegurar que cada situación relacionada con el bullying se atiende un periodo máximo de 10 días.
Íngrid Naranjo, psicóloga experta en bullying, dijo que el año anterior se registró el suicidio de un menor de edad por recibir acoso y agresiones. Además que a 2015 se reportaban 21 suicidios por la misma causa en personas de entre 14 y 21 años.
Estudios aplicados, según la especialista, logran demostrar que las secuelas del bullying pueden estar presentes aunque hayan pasado 40 años y es posible que esas personas presenten lesiones.
“Nos enteramos que de 20 camas que existen en el Hospital Nacional Psiquiátrico para la atención de adolescentes, 15 se utilizan para menores víctimas de bullying”, expresó.
Quienes sufren este tipo de agresiones son personas que pueden llegar a tener problemas como depresión, ansiedad, dolores de cabeza y problemas de adaptación en la escuela.
Los menores pueden presentar bajo rendimiento académico, tristeza, estrés, baja autoestima, pensamientos suicidas e ira, entre otros.
Kattia Grosser, directora de Vida Estudiantil del MEP, asegura que de 2010 a 2017 se reporta una disminución de casos. En 2010 la violencia entre estudiantes era de 60.900 casos y pasó a 35.415 en 2017.
“Específicamente, en violencia verbal, en 2010 se registraron 36.215 casos, pero bajaron en 2017 a 19.864. En cuanto a la agresión física pasó de 14.561 a 7.558 en el mismo periodo”, detalló.
PERIODISTA: Sergio Jiménez
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Lunes 27 Mayo, 2019
HORA: 12:00 AM
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