“Tenían poco más de seis meses de vivir en la cuartería que la madrugada del sábado fue consumida por las llamas en La Carpio”. Así relató Maikel Velázquez el drama que vivió en ese momento y en lo único que pensaba era salvar a su familia mientras escuchaba a sus vecinos pedir auxilio.
“Mi esposa se levanta y ve las llamas, ahí me despierta y me dice: ‘Maikel levántese porque se está incendiando todo’. En lo que yo reacciono lo que busco es ir a levantar a las chiquitas para salir”, narró.
Esta familia vivía en el primer cuarto de la estructura que fue arrasada por el fuego, por lo cual lo primero que hizo fue buscar la entrada principal para ponerse a salvo, pero para ese momento ya era demasiado tarde.
“Lo primero que pienso es en salir y buscar la manera de salvar las cosas, pero no fue posible, las llamas estaban en esa entrada. Empezamos a tocar en todos los cuartos para sacar a la gente.
Busco la manera de apagar el fuego, pero ya era imposible, así que decidí irnos para el fondo, pero estando ahí vemos cómo las llamas se están extendiendo más y ya venían llegando a nosotros”, relató entre lágrimas.
En medio de la angustia observó una escalera que lleva a una especie de bodega, construida en el segundo piso, donde había materiales de construcción y en ese momento era la única opción de salvar a su familia
“Subí a mis hijas, primero la más chiquita, y luego subí a mi esposa, detrás de nosotros venía otra pareja con una niña que también se salvó. Lo que vi fue una luz, que no sé si era una lata, un plywood o qué, pero corrí hacia ella”, añadió.
En ese momento ya estaban a salvo, lograron alejarse de la estructura en llamas, pero lo habían perdido todo. Las demás personas aún permanecían dentro, pedían ayuda a gritos para que las sacaran y las pusieran a salvo.
“Yo quería ayudar, mojé la camisa para taparme y regresar, pero era imposible, el humo era demasiado. Los vecinos gritaban: ‘¡Ayuda, ayuda!’. Recuerdo un niño, yo quería volver por él, pero ya no se veía nada. Ningún foco de celular servía ahí”, relató.
Cuando la familia de Velázquez logró salir vio llegar las unidades de bomberos, unos 15 minutos después de que se inició la emergencia, y no había nada que hacer por los que quedaron dentro de la cuartería.
“Cuando los bomberos llegaron las víctimas estaban ahogadas, ya las llamas habían avanzado demasiado, solo quedaba apagarlas para sacar los escombros”, afirmó.
Su esposa Milady debió ser atendida en el Hospital Calderón Guardia por la gran cantidad de humo que inhaló, también por cortes y quemaduras en las piernas, producto de la horrible experiencia que vivieron.
Esta familia que lo perdió todo intenta levantarse y para ello agradece cualquier ayuda que se le pueda brindar. Para contactarla puede llamar al teléfono 7035-0892.
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CRÉDITOS: Fotos: Cristian Cartín
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Lunes 15 Abril, 2019
HORA: 12:00 AM
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