Soy una mujer divorciada de 35 años. Estuve casada por más de 10 años y nunca tuve problemas en las relaciones sexuales. Ahora tengo tres años de divorciada, no tengo pareja estable. Cuando tengo relaciones me da alergia al semen. Quedo toda irritada, me da ardor, picazón, la piel se me pone roja y paso así varios días. Las molestias son tan fuertes que no puedo tener relaciones dos días seguidos y a veces me arde tanto que no puedo hacer ejercicio.
Probablemente esta es una de las consultas más frecuentes en la práctica ginecológica diaria. La paciente relata cuadros floridos y molestos caracterizados por ardor, picazón, enrojecimiento, fisuras, acompañado algunas veces de molestias urinarias y de una secreción blanquecina, síntomas que pueden durar desde varios días hasta una semana. Debido a que el malestar se desencadena con la relación sexual y como no se detecta ningún agente infeccioso se tiende a creer que es una alergia al semen.
Aun cuando en algunas mujeres las alergias al semen producen estas molestias, en la mayoría de los casos se trata de un cuadro infeccioso, que se activa sea con el semen, con la fricción de la penetración y a veces con el contacto con el condón. Estos cuadros infecciosos suelen ser virales y tienen la particularidad que no se detectan con los exámenes habituales, como el examen de orina, el frotis y los cultivos de la secreción vaginal.
Hoy contamos con pruebas especiales que detectan esta infección viral y nos permite instaurar el tratamiento respectivo, con el cual los síntomas disminuyen, tanto en duración como en intensidad, lo que les permite a muchas mujeres gozar de una vida sexual normal lejos de las irritaciones y molestias.
