Las autoridades antidrogas costarricenses se muestran preocupadas por el aumento en la producción de la hoja de coca en diferentes puntos de Colombia, que se mantiene como el principal productor, seguido de Ecuador y Perú.
El área de cultivo del insumo básico para el polvo blanco creció un 17% hasta 171.000 hectáreas, mientras que el potencial de producción de cocaína subió un 31%, según manifestó la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd).
La cantidad de dinero que mueven las drogas ilícitas es impresionante, por lo que no solo pasará por nuestras costas y fronteras cocaína, sino también dinero y armas de fuego que utilizarán los grupos del crimen organizado que operan en Costa Rica.
La Onudd estimó que la producción potencial de cocaína en Colombia tiene un precio en el mercado local de $2.700 millones, pese a que el kilo bajó un 11% ($1.400), por lo cual los expertos interpretan que el precio responde al aumento en la disponibilidad.
Recientemente la Fuerza Pública adquirió tres embarcaciones interceptoras que permanecen en puntos estratégicos del Pacífico, por donde pasa más del 80% de la droga que llega a territorio nacional proveniente de las zonas colombianas del Cauca, Putumayo, Santander y Antioquia.
Michael Soto, ministro de Seguridad, manifestó a DIARIO EXTRA que han visualizado la problemática porque la fumigación se hace por tierra.
“Hemos hecho incautaciones muy importantes, en una semana se han decomisado 6 toneladas de cocaína, una cifra nunca antes vista, lo que viene a decir que no solo al país afecta, sino también a la región centroamericana.
Existe una sobreproducción del alcaloide que ocasiona que bajen los precios (hasta ¢5 millones el kilo) y la gente consuma más en un mercado muy abundante, que estamos contrarrestando con trabajos en conjunto con autoridades colombianas y estadounidenses, que nos ayudan a patrullar el Pacífico”, recalcó.
MÁS DE 18 TONELADAS
El Ministerio de Seguridad en lo que va del año ha asestado fuertes golpes al tráfico local e internacional de drogas, dando como resultado el decomiso de más de 18 toneladas y la detención de presuntos narcotraficantes, entre otros.
La Policía Control de Drogas (PCD) contabiliza el decomiso de 15 toneladas de cocaína, 3 toneladas de marihuana, 1.255.870 plantas de marihuana, 69.162 dosis de crack, 53.868 de éxtasis o MDMA, 115 de ketamina, 5 kilos de hachís y 35 de LSD.
Esto se logró tras 404 operaciones antidrogas, en las que decomisaron ¢69 millones, poco más de $1 millón y casi €37.000, 90 vehículos y 78 armas de fuego de diferentes calibres y sus respectivas municiones.
A lo anterior se suma la detención de 675 personas que figuran como sospechosas del delito de tráfico de droga.
A raíz del repunte del cultivo y el tráfico de drogas, las autoridades colombianas valoran retomar las fumigaciones aéreas, suspendidas desde 2015 por potenciales afectaciones a la naturaleza y la vida humana. Estados Unidos, el principal consumidor de cocaína, apoya la medida.
