“Quiero morirme y que se mueran todos”, esas fueron las palabras de un alumno de la humilde Escuela de Granadilla Norte en Curridabat, donde puso a correr al personal de toda la institución.
El sentir del pequeño, el cual tiene 10 años de edad y cursa el cuarto grado, nace a raíz de una serie de situaciones alrededor de su vida, entre las que se incluye el maltrato intrafamiliar y el bullying. De acuerdo con Julieta Barboza, directora del centro educativo, desde hace varias semanas vienen dando atención al pequeño, pero lo que este llegó a decir la mañana de este jueves las dejó heladas.
“Él viene a la escuela y estábamos en el festival de las artes, en eso me llama una maestra muy preocupada porque el niño le dijo que quería morirse, por ver la muerte como una solución a todos sus problemas”, dijo.
“Desde hace más de un mes lo hemos tenido en observación, pues aquí contamos con psicóloga y trabajadora social, las cuales ya han mostrado preocupación por todo lo que hemos visto”, agregó. Barboza habló primero con el pequeño, donde este le contó su malestar, la situación que vive actualmente en su casa y cómo siente que sus compañeritos de clase lo atormentan de diferentes maneras.
UN HOGAR DISFUNCIONAL
La educadora resaltó que el pequeño viene de un hogar disfuncional, donde se ha visto envuelto en varios cambios, los cuales han terminado afectando su autoestima, sus relaciones personales y su manera de ver la vida.
“El padre del pequeño los abandonó en marzo de este año, la madre a cómo puede lleva el hogar, pues el papá no paga pensión, además, la madre confesó que ella en ocasiones tiene pensamientos suicidas”, sostuvo.
Al mismo tiempo, la progenitora del menor en apariencia no lo ve como un niño, sino que lo trata como un hombre, poniendo más peso sobre sus hombros en temas que no deberían preocuparle a esa edad.
La situación familiar, sumado a los abusos que asegura vive de sus compañeros, conllevaron a que este jueves por la mañana salieran de una manera muy sincera las palabras que preocuparon a todos.
ESCUELA LO MANTENDRÁ VIGILADO
Debido al protocolo que maneja la escuela, la directora llamó al 9-1-1 y al Patronato Nacional de la Infancia (PANI) para que estos llevaran al estudiante a un centro médico donde se pueda analizar por otro especialista.
Sin embargo, Barboza aseguró que a partir de hoy intensificarán las acciones para que el infante trate de ver un panorama distinto, más positivo, de su situación actual y con la esperanza de un mejor futuro.
“Nosotros ya tenemos todo listo, en la escuela manejamos protocolos para este tipo de situaciones, el pequeño podrá incluso ir a hablar con la psicóloga durante las clases para desahogarse y buscar ayuda”, reveló.
La directora recalcó que un pequeño de tan solo 8 años y de apellido Sánchez se quitó la vida tras ahorcarse en la habitación de la casa donde vivía, en Alajuelita en septiembre del año pasado.
Según señala, los centros educativos deben estar preparados para afrontar hechos de riesgo como estos, a la vez que las autoridades deben aumentar las políticas públicas en favor de la salud mental.
De acuerdo con el Hospital Nacional de Niños, las tendencias suicidas por parte de menores cuya edad oscila entre los 10 a 12 años son más frecuentes de lo que se cree y muestran un incremento durante los últimos 6 años.
Aunque existen distintos detonantes para dichas acciones, los especialistas coinciden en que los más comunes son el denominado “bullying”, el acoso en los centros de estudio y los problemas con los padres.
Lamentablemente en el caso del menor de Granadilla Norte, su vida se ha visto influenciada por todos estos factores, por lo que sus maestros lo ven como un llamado de auxilio para evitar una catástrofe.
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CRÉDITOS: Foto: Herbert Arley/Archivo
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Viernes 01 Junio, 2018
HORA: 12:00 AM
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