A pesar de la gran convocatoria para la marcha de este miércoles, los traileros nacionales admitieron que no formarán parte de esta actividad, sino que se lanzarán a la calle hasta el próximo 1° de mayo.
Esto para presentarse en la marcha en conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores, la cual será liderada por distintos movimientos sindicales de todo el territorio nacional.
Así lo confirmó Marco Murcia, presidente del Sindicato Nacional de Traileros, agrupación perteneciente al mismo tiempo a la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP).
“Nosotros no vamos a participar en la marcha de este miércoles, pero sí estaremos en las calles durante el primero de mayo, queremos enviar un mensaje directo al nuevo presidente Carlos Alvarado durante ese día”, dijo.
Según explicó Murcia, la idea es hacerle ver al mandatario electo que ellos son un sector importante y que necesitan que se les tome en cuenta en temas que les afectan desde hace varios años.
“Queremos que se entable el diálogo con respecto a nuestros problemas de manera directa con el mandatario, no que se nos mande a cualquier persona, sino algo que sea directo con el señor presidente”, sostuvo.
De acuerdo con los traileros, son varios los problemas que han venido sufriendo desde hace años, afectando sus ingresos económicos que se ven disminuidos cada día más hasta llegar casi al borde de la quiebra.
Por ejemplo, el que decenas de traileros extranjeros sigan acampando en diferentes puntos del territorio nacional ha hecho que los trabajadores nacionales de este sector se encuentren molestos con las autoridades.
Según argumentan, se siguen presentando casos de choferes de tráileres de países como Panamá, Honduras, Nicaragua y El Salvador, los cuales ingresan al país y se mantienen a la espera de que alguna empresa les dé trabajo.
Mientras tanto, se parquean en sitios como Alajuela, Heredia, Orotina y Limón, donde establecen asentamientos temporales que en muchos casos utilizan por varias semanas antes de movilizarse.
Al mismo tiempo, muchas empresas costarricenses prefieren los servicios de los extranjeros debido a que se les paga muy poco en comparación con lo que deberían cancelar a un chofer tico.
Murcia señala que en muchas ocasiones la diferencia de tarifas entre un nacional y un foráneo oscila entre $200 y $700, afectando no solo la salud de miles, sino las arcas del Estado en general.
Otro de los reclamos es el alto costo de los peajes en la ruta 27, alegan que el monto es demasiado elevado, lo que ha conllevado a que sus ganancias disminuyan de manera considerable.
