La Casa de Cristal de Luis Guillermo Solís, como él bautizó hace cuatro años a la Presidencia, decidió archivar una denuncia por acoso y maltrato laboral en contra de Mauricio Ventura, ministro de Turismo, interpuesta por uno de sus subalternos.
Henry Wong Carranza, director ejecutivo del Polo Turístico Golfo Papagayo, una oficina del Instituto Costarricense de Turismo, acusó el 6 de julio de 2017 a Ventura ante el Ministerio de Trabajo por acoso y maltrato laboral, pues el jerarca llegó a tratarlo hasta de “jueputa” (ver recuadro).
Por tratarse de un miembro del gabinete, el Ministerio de Trabajo decidió trasladar el 19 de julio la investigación al Consejo de Gobierno, que el 2 de febrero ordenó archivar el expediente contra Ventura por orden expresa de la secretaria de ese órgano, Xinia Chacón Rodríguez. El archivo del caso se concretó el 15 de febrero.
Wong Carranza señala la presión de Ventura para que esa oficina avance en el otorgamiento de permisos y licencias para el desarrollo de proyectos turísticos en esta zona, aunque esto implique no acatar disposiciones de ley.
El funcionario acusó a Ventura por presuntas presiones y por la manera irrespetuosa y grosera con que los trató a él y a la oficina que dirige.
“…no comparto con don Mauricio la forma en que me trató y considero que sus llamadas de atención son desmedidas, así como irrespetuosas, tanto en su trato personal como en la forma en que se refiere al trabajo técnico que es competencia de la Dirección Ejecutiva (…) las directrices del señor Ministro deben ser respetadas por nosotros, siempre y cuando nuestro accionar esté apegado y sustentado al principio de legalidad, a los criterios técnicos que son los que deben imperar en nuestro accionar, salvaguardando el interés público y los bienes del Estado”, se lee en la denuncia, a la que DIARIO EXTRA tuvo acceso.
Entre las gestiones que el Ministro habría presionado al funcionario para que se apresurara se encuentra una prórroga a un proyecto del concesionario Rubén Pacheco y su negocio Enjoy Hotel & Resort S.A., quien a la fecha de la denuncia incumplía con el requerimiento de la construcción de un parqueo público en ese negocio.
Ventura también enfiló sus ataques vulgares contra el funcionario cuando este se negó a gestionar un presupuesto para el proyecto de un acueducto llamado Las Trancas, pues la Contraloría General de la República no aprobó dicho desembolso por parte del ICT.
“Don Mauricio se molestó mucho y me advirtió que yo me estaba metiendo en problemas con él”, añade la denuncia.
El ofendido por recomendación de sus abogados prefirió no dar declaraciones a El Periódico de Más Venta en Costa Rica.
Además de ser ofendido por Ventura, el funcionario dijo que fue víctima de una persecución. El 30 de setiembre Wong Carranza amplió su denuncia porque al parecer el Ministro empezó a quitarle funciones y personal a su cargo.
También denunció que el 4 de julio de 2017 Ventura le ofreció cambiarlo de puesto y una indemnización, o en su lugar trasladarlo a otra institución o abrirle un procedimiento administrativo para que perdiera su plaza. “Claramente usted y yo no podemos trabajar juntos”, le habría dicho el jerarca a Wong Carranza, según la denuncia.
A pesar de la insistencia, la Presidencia no se refirió a las razones y los argumentos de fondo para mandar archivar el caso de Ventura, amigo cercano de la vicepresidenta Ana Helena Chacón y del presidente Solís.
“No se descubre del análisis de los alegatos que las manifestaciones del señor Ventura se hayan producido con la característica de un ataque dirigido de manera personal en contra del denunciante, siendo que las discusiones que conforman el análisis medular de este caso se realizaron considerando las responsabilidades administrativas que ambos funcionarios tienen y la jerarquía que uno ostenta sobre el otro”, expresó la Presidencia.
¡QUÉ BOCA DEL MINISTRO!
Casa Presidencial, además de ni siquiera abrir una investigación contra Mauricio Ventura por la manera tan irrespetuosa en que se dirigió a un funcionario, tampoco le llamó la atención para que midiera sus palabras y dejara ese vocabulario y carácter tan explosivo.
Del audio al que tuvo acceso DIARIO EXTRA se desprenden varias de las expresiones con que el jerarca trató a su subalterno. La conversación tuvo lugar el 26 de junio de 2017 en una reunión interna con otros funcionarios del ICT.
“…y no lo veo a usted jueputa (golpea la mesa dos veces) empoderado empujando estas carajadas. ¿Usted cree que las cosas salen fácil y salen porque yo estoy sentado esperando a ver si la junta directiva me aprueba una putada o no?”.
“…Vienen inversionistas a fin de año y qué putas les vamos a enseñar de Papagayo. Mañana vienen unos inversionistas de Dubái, ¿qué putas les enseño?”.
“…Todo aquí dura años, jueputa inutilidad. Todo es así, esto para dentro de seis meses y resulta que se pone uno detrás y sale en seis hijueputas días (vuelve a golpear la mesa)”.
“…Vea a ver cómo putas hace para que esta oficina produzca porque estamos a punto de tener serios problemas, realmente serios problemas, no puede ser la incapacidad de producción”.
“…El consejo director es el más sabio para saber cuánto vale la hijueputa oficina. ¿Y usted en qué está, huevón? (vuelve a golpear la mesa dos veces)”.
VENTURA: “FUE POR LOS NIVELES DE FRUSTRACIÓN”
Mauricio Ventura nunca atiende a DIARIO EXTRA, nos huye, sin embargo el martes accedió a una breve entrevista en la que justificó su comportamiento y trato soez hacia un funcionario.
Henry Wong dice que su trabajo lo hace apegado a la legalidad y que recibió presiones suyas, pero esas instrucciones con un vocabulario muy vulgar, por esto lo acusó ante el Ministerio de Trabajo…
-Esa denuncia ya fue archivada.
Si, yo sé que se archivó hace cinco días, pero hablemos del vocabulario con que usted se dirigió a una persona. ¿Es propio de un ministro de Estado tratar de jueputa a un subalterno?
-Se está confundiendo y por eso se planteó la denuncia sin ningún mérito. Es que se ha confundido el acoso con las manifestaciones propias de las exigencias del cargo. Hay una clara obligación de cumplir con el mandato que el puesto requiere y ante lo que se ha considerado una inoperancia, entonces hay manifestaciones que no son dirigidas a don Henry en lo personal, sino niveles de frustración por el poco avance.
¿Y su frustración justifica que usted trate de jueputa a otra persona? Le repito, ¿es propio de un ministro de Estado ese comportamiento y ese vocabulario tan soez?
-Mire, los niveles de frustración se expresan de diferentes maneras, pero en todo caso no es un ataque personal.
¿Usted no controla su carácter?
-Lejos de no controlar el carácter, lo que demuestra es el interés que se produzca para el Estado costarricense y teniendo la oportunidad de hacerlo, que se haga al máximo de la responsabilidad y la obligación que el puesto demanda. Las expresiones que se dieron fueron contra el hecho, no contra la persona.
¿Después de esa vulgaridad con que se dirigió a Henry Wong al menos le ofreció una disculpa después?
-Lo que ocurre es que si yo hubiera insultado a don Henry es posible que le haya pedido una disculpa, pero lo cierto es que mis manifestaciones son por la frustración ante el hecho ocurrido y por la falta de resultados.
¿Qué pasaría si todos los ministros actuaran así, que traten a sus subalternos de jueputas cuando las cosas no salen como quieren?
-Si es un insulto yo pido disculpas, pero no ha sido un insulto, no lo he ofendido.
¿Por qué trataron de mover de puesto a Henry Wong? Él asegura que sus acciones se amparan en la Ley de Administración Pública.
-Esos son alegatos de don Henry, pero de nuevo, lo que frustra es que no se realicen las gestiones.
PRESIDENTE LE AGUANTA TODO
Esta no es la primera vez que Casa Presidencial sale en auxilio de Ventura.
En enero de 2017 DIARIO EXTRA dio a conocer que el jerarca gastó varios millones de colones para llevarse a siete de sus asesores a una feria de turismo en Madrid, España, entre el 18 y 22 de enero. Ventura los montó al avión con la excusa de que iban a trabajar en la feria, a pesar de que el ICT meses atrás contrató a una agencia de comunicación en Europa por miles de euros para hacer el trabajo en mercadeo y comunicación durante ese evento. En ese momento Casa Presidencial le consintió el gastó, no le puso peros y rechazó las críticas de la oposición por lo que consideraba un despilfarro.
A mediados de 2017 el presidente Solís le toleró y consintió que gastara ¢375 millones de todos los costarricenses en un costoso y lujoso congreso, en medio de la crisis fiscal y pocos días después de la emergencia causada por la tormenta tropical Nate.
PERIODISTA: Carlos Mora
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Miércoles 21 Febrero, 2018
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