Willy Escalante, Angie Padilla y Freddy Segura, jueces del Tribunal Penal de Desamparados, escucharon el testimonio de los hijos biológicos de Johana Calderón, quien es juzgada como responsable de la muerte de la niña Brittany, ocurrida en la casa de la mujer en Jericó de Desamparados, el 19 de abril de 2014.
Esteban Abarca y Melissa Guevara, 23 y 19 años, respectivamente, por espacio de dos horas rindieron declaración y ambos coincidieron al describir a Calderón como una madre ejemplar, respetuosa, solidaria, comprensiva, tierna y de valores.
Además brindaron detalles del día de los hechos y desmarcaron a su madre del crimen del que se le acusa, pues aseguraron que Brittany, de 4 años, fue diagnosticada informalmente con autismo.
AUTOAGRESIÓN
El relato de ambos jóvenes empezó con una descripción de la acusada, a quien calificaron como una madre ejemplar, llena de valores, amorosa, entregada, que durante toda su vida ayudo al prójimo.
Según sus hijos, el amor por los demás la llevó a ser misionera en Talamanca y la India en sus años de juventud.
Por el contrario, aseguraron que su hermanastra era una niña extraña con comportamientos que la llevaban a autoagredirse sin motivo alguno.
“No se comportaba como cualquier niña, cuando se enojaba simplemente agarraba un fuerzón, se tiraba para atrás y se golpeaba. Se agarraba el pelo con fuerza y nos decía que no le dolía. Esas son conductas que un niño no debería hacer. Cuando se enojaba era cuando pasaban las cosas y terminaba golpeando el piso con la cabeza”, relató Melissa.
PANI
La joven arremetió con todo contra las autoridades del Patronato Nacional de la Infancia (PANI), pues indicó al tribunal que estas los dejaron solos y nunca tuvieron respuestas, pese a la gran cantidad de peticiones para que abordaran a la menor, debido a su extraño comportamiento.
“El PANI siempre nos decía que teníamos que esperar para que nos entregaran los papeles. Nunca recibimos una ayuda profesional, que era necesaria por parte del PANI. A la casa hicieron una visita, una trabajadora social, a quien se le notificó la situación que pasó con las quemadas de mi hermana. Les advertimos que la niña se comportaba extraño y nada hicieron”, agregó.
AUTISTA
El relato de la joven era muy preciso y lleno de detalles del día de los hechos, situación que llamó la atención del juez presidente Freddy Sandí, quien se lo hizo ver a la defensa. La hermanastra de la víctima indicó que una familiar, connotada especialista de una escuela de neuropsiquiatría ubicada en Guadalupe, visitó a la familia y le diagnosticó espectro autista a Brittany.
“Mi tía es especialista en la enfermedad espectro autista, visitó la casa, le puso atención y vio el comportamiento de la niña. Mi tía nos dijo que ella (la víctima) tenía una discapacidad y necesitaba la ayuda de un neurólogo, pero el PANI no lo notó.
Mi mamá comenzó a buscar ayuda, pero negaron la atención porque teníamos los papeles de la niña vencidos y el PANI no se preocupó en darnos los documentos”, narró.
Posterior al testimonio de Melissa, su hermano Esteban rindió su versión de los hechos, la cual era muy similar en tiempo, espacio y detalles de lo narrado por la joven, tal como quedó consignado en los análisis de la unidad forense de investigación.
PERIODISTA: Gustavo Retana
EMAIL: [email protected]
Sábado 22 Julio, 2017
HORA: 12:00 AM
SIGUIENTE NOTICIA