Para el exregulador general Leonel Fonseca, la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) no debería calcular el precio local de los combustibles tomando como parámetro los precios internacionales o fórmulas matemáticas de cálculo, sino que se debería basar en lo que gasta la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) al momento de hacer la compra.
Fonseca reiteró que se le debería reconocer a Recope únicamente la inversión que hace al momento de comprar los productos terminados, con lo cual el precio local de los hidrocarburos sería menor al que se paga en la actualidad.
Agregó que al implementar la metodología, tanto ordinaria que se aplica una vez al año como la extraordinaria cada mes, le genera mayores recursos a la entidad refinadora y por consiguiente superávit.
El artículo 3 de la Ley de la Aresep señala en el inciso b) que el servicio al costo es el “principio que determina la forma de fijar las tarifas y los precios de los servicios públicos, de manera que se contemplen únicamente los costos necesarios para prestar el servicio, que permitan una retribución competitiva y garanticen el adecuado desarrollo de la actividad”.
ALERTAS PREVIAS
A criterio del exregulador, de aplicar dicho principio los consumidores tendrían “un precio menor, real y justo”.
Dijo que en ocasiones anteriores la Defensoría de los Habitantes y la Intendencia de Energía alertaron sobre dicha situación e incluso las autoridades de Recope han señalado que pone a disposición de la Aresep la información de cuánto gasta cuando compra los combustibles en el mercado internacional.
“El problema de los precios de los combustibles es un asunto añejo (…) Desafortunadamente, las metodologías o fórmulas matemáticas que se han venido implementando toman en cuenta los precios internacionales de los combustibles y no lo que dice la ley. ¿Eso qué es lo que significa? Estamos pagando unos precios que son producto de la bolsa de la transacción del petróleo y sus derivados en el mercado internacional, que son a futuro y producto de la especulación de los que dominan el mercado”, explicó.
Apuntó que en la crisis de 2008 se demostró que la especulación de los mercados internacionales fue del 70%.
“Lo único que hay que aplicar es el valor real del costo de los combustibles, ni los precios internacionales, ni las metodologías deberían aplicarse.
Eso generó -a Recope- al año 2014 ¢220 mil millones de superávit, producto de lo que pagaron de más los consumidores.
Por último recalcó que ese superávit Recope podría usarlo en la construcción de obras como por ejemplo la construcción del muelle petrolero o las esferas de gas.
PERIODISTA: Krissia Morris Gray
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Lunes 20 Marzo, 2017
HORA: 12:00 AM
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