Urgencia de un exorcismo, tildar la Cancillería como una “casa de sustos” y hasta calificativos como “vergüenza” para desacreditar su labor. Esos son algunos de los dardos que ha recibido de varios actores políticos el canciller Manuel González, tras varias decisiones que han generado polémica.
En su despacho, González atendió a DIARIO EXTRA, para referirse sobre “el régimen de terror” que, según los funcionarios del consulado de Houston, ha establecido la cónsul Rosa Patricia Arguedas, quien fue nombrada a pesar de tener antecedentes judiciales por violencia, entre ellos agredir a un juez de la República.
González encaró su decisión de nombrar inexpertos en embajadas, y nuevos casos a los que este medio tuvo acceso. Por ejemplo, se le critica que ha querido maquillar temas relacionados con la embajadora política en Austria, la consejera política en Paraguay y el embajador en China, a quien estaría pronto a destituir.
En adelante un extracto de la conversación.
¿Usted conocía a Rosa Patricia Arguedas?
-En absoluto. Nunca la he conocido. En un concurso público inédito, que por primera vez en 173 años de historia de este Ministerio se hizo un concurso público para llenar plazas que estuvieran vacantes por inopia. Lo hicimos en el 2015, se recibieron cerca de 300 currículos que se procesaron y se entrevistaron a los que cumplían con los requisitos. Ella fue parte de ese grupo. No tiene ninguna relación conmigo, ni ninguno de los que han sido nombrados ahí.
¿Conocían del antecedente judicial de violencia?
-No consta en ningún expediente que tuviera un antecedente judicial.
Pero tiene dos casos de violencia, uno contra un juez de la República
-Aquí no existe ningún antecedente judicial de esa señora
¿La Cancillería no se da el trabajo de hacer esa investigación?
Hay una hoja de delincuencia que aportan. Nosotros no somos policías.
No son policías, pero es su deber nombrar representantes del país, lo cual es muy delicado…
-Esa señora no tiene ningún record judicial.
Tiene dos procesos por violencia. ¿No le hace pensar que debe mejorar los canales que utilizan para seleccionar?
-Es que yo no soy policía.
Usted es el mayor representante diplomático… (interrumpe)
-No puedo investigar a ese nivel a todas las personas.
En un caso como este en el que un antecedente por violencia tiene efecto en las funciones, ¿considera que debería contemplarse al momento de elegir?
-No ha sido por esa razón que decidimos moverla. Nosotros necesitamos ese puesto para otro destino. A mí no me consta ninguna de esas agresiones, yo no estoy ahí. No hay ningún procedimiento con una resolución firme acá sobre un actuar violento como dicen ustedes.
Los funcionarios del consulado la están denunciando…
-¿Cuáles funcionarios?
Por ejemplo, el cónsul general, don Carlos Humberto Pacheco…
-Claro, que aporte todas las pruebas. Bienvenidas, yo no puedo actuar simplemente porque alguien diga que le hizo mala cara. Son 200 y pico de funcionarios que tenemos en el extranjero, son 62 oficinas que tenemos en el extranjero, incluyendo misiones y consulados. Imagínese el montón de situaciones que en el día a día se pueden dar entre los funcionarios, pueden ser muchos.
Ya el Cónsul envió la carta alertando la situación…
-No necesitamos una carta, necesitamos las pruebas. No puedo actuar por una carta.
Usted sabe que los casos de acoso laboral se dan generalmente en un plano privado ¿Por qué no abre la investigación para determinar la veracidad?
-Que aporten las pruebas y la abrimos. No tengo ningún reparo en eso.
¿Una carta de un cónsul general no es motivo para abrirla?
-¿Dónde están las pruebas?
¿Le preocupa que haya funcionarios atemorizados en ese consulado?
-Todas las situaciones que tienen pruebas se atienden, de eso no me cabe la menor duda. No tengo ninguna razón para que no se atienda, sí se dan.
¿Tiene que venir el funcionario golpeado para que usted investigue?
-Si viene golpeado no va a venir donde mí, para eso hay un departamento Consular, de una Dirección de Servicio Exterior. Son 62 oficinas en el extranjero, ¿usted pretende que yo fiscalice y le lleve la cuenta?
Es su labor fiscalizar…
-No, hay 200 funcionarios afuera, y 200 funcionarios en esta institución, si todo me toca a mí, entonces echémoslos a todos.
Usted delega, puede tomar proactivamente decisiones al respecto. A usted le toca comprobar qué está pasando con sus funcionarios…
-No es así, hay 200 funcionarios que se encargan aquí de todo el movimiento de este Ministerio sólo aquí, y 200 funcionarios afuera ¿Usted pretende que yo sepa absolutamente puntos y comas, entradas, horas?
No. Hay funcionarios que denuncian presuntas agresiones. ¿Ante ese nivel abre una investigación?
-Yo no puedo presumir porque alguien dice que una persona le hizo una cara larga, hay que abrir un procedimiento. Presenta las pruebas hay un departamento. La Ley de Administración Pública lo fija claramente.
¿Cuándo usted la despidió ya tenía conocimiento de estas denuncias?
-La razón por la que se cesó es que íbamos a pasar ese puesto a otra embajada.
Lo que le pregunto es, ¿si al momento del despido usted sabía que había funcionarios que alegaban ser víctimas de agresión?
-Que hubiera llegado aquí un procedimiento administrativo que me dijera que había alguna denuncia en camino, no. Mire aquí llega todo el mundo hablarme a mí del director de este, del director del otro de que funalito le hizo un problema, yo no puedo meterme en todo eso. Para eso hay un régimen disciplinario. Una Dirección de Servicio Exterior, un departamento diplomático, consular. Las cosas no empiezan de arriba para abajo. Yo soy el jerarca el que toma la decisión final.
¿No considera una contradicción despedirla alegando que no se requiere, cuando hay un informe de auditoría que señala que se necesita más personal?
-Cualquier informe toma la fotografía de un momento “x”, puede ser de hace dos años, no puede tener la bola de cristal de lo que va a pasar. Las circunstancias cambian. Hay movimientos que suben y bajan. Lo he denunciado, lo he dicho repetidas veces, todas las oficinas del servicio exterior de Costa Rica no tienen suficiente personal. Si no se aprueban más plazas, qué puedo hacer yo.
¿Cómo argumenta cambiarla entonces?
-Bueno, porque queda un cónsul general, le pasamos la plaza a otro donde podemos hacer mejor uso de esos recursos. En la gran mayoría de las embajadas lo que tienen es un embajador y un ministro consejero.
Ya que la cónsul apeló el despido, ¿podría tomar la decisión de pasarla a otro lugar?
-Yo no puedo tomar una decisión sin ninguna evidencia. Sin ningún fundamento de sancionar a alguien, entienda. Hay un debido proceso que dispone la Ley General de Administración Pública. Es que no lo invento yo, no entiendo qué espera que yo haga si no hay la prueba para iniciar un procedimiento administrativo (…) No entiendo que es lo que usted espera de mí.
Los diputados de oposición hablan de que usted es una vergüenza ¿Qué opina?
-(Explota en risas) Lo dijo una persona, y no tengo por qué opinar sobre eso.
Lo dijo el fundador del partido que usted representa…
-¿Y a mí qué? No es mi jefe. Yo no represento a un partido, represento al Gobierno, y fui nombrado por el Presidente de la República. No por la persona que dice eso, a él no le debo cuentas de nada.
¿Qué pasó con el caso de la consejera política en Paraguay? Se le impusieron faltas graves disciplinarias, pero usted omitió eso en el informe de despido. ¿Por qué?
-Porque son de libre remoción. Nunca se ha puesto.
¿No le parece que por transparencia debería ponerse?
-Porque la ley dice que es de libre remoción y nombramiento. No he incumplido absolutamente nada. Son resoluciones administrativas intrascendentes, rutinarias. El Régimen del Servicio Exterior está regulado por una ley especial que no obliga nada de eso. Si no están conformes con la ley, modifiquen la ley.
Y en el caso de la embajadora política en Austria, Pilar Saborío Rocafort, se comprobó múltiples ausencias y mal uso de recursos públicos, y sólo la amonestó por escrito…
-Eso no se pudo demostrar, lo de ausentarse del trabajo. Lo otro fue… ¿qué había sido María? (pregunta a asesora) Fueron varias razones y se hizo un procedimiento administrativo en ese caso.
¿Usted la trató de proteger?
-Qué interés puedo tener, ninguno. (…) Esta ha sido la única Administración que ha removido embajadores nombrados por la propia administración y que no le ha tapado nada a nadie.
¿Es proporcional amonestar si se comprueba que hubo corrupción con recursos públicos?
-No es corrupción, eso lo está diciendo usted. Hay un expediente de este tamaño que da una recomendación y con base en eso se da una decisión.
¿Qué fue lo que se determinó en ese caso?
-Vaya a leer la resolución
¿No lo recuerda?
-Qué me voy a acordar con todo lo que tengo que firmar todos los días.
Pero en un caso de ese nivel debería tenerlo claro…
-¿Nivel de qué?
De corrupción. Si hay mal manejo de fondos públicos es corrupción…
-No es corrupción.
Si usted me dice que no fue eso…
-Lea la resolución administrativa.
Voy a esperar que me de la información,
¿Va a destituir al embajador de China?
-No le he puedo hablar de eso, hasta que no se haya comunicado al país las decisiones que tenga Costa Rica sobre un puesto u otro
¿Hay irregularidades en el trabajo del embajador?
-No me puedo referir a eso por respeto al embajador y a China.
Sobre los nombramientos políticos que usted ha hecho (interrumpe)
-No son políticos, son en condición de inopia.
Hay reclamos los diplomáticos porque no se les toma en cuenta. ¿Insiste en proteger el mecanismo?
-Es el que da la ley. Para evitar los abusos propusimos una reforma integral en el estatuto del servicio exterior. Precisamente para que no se pueda en el futuro utilizar este tipo de nombramientos como botín político. Por primera vez, esta administración hizo un concurso público, de cuya base ha extraído al menos el 99% de los nombramientos que ha hecho por inopia. No son nombramientos políticos, porque eso tiene una connotación de a dedo. (…) ¿Si nombro funcionarios por inopia a quién nombro? (…) La prioridad para los funcionarios de carrera es absoluta. No solo porque creo en eso sino porque así lo dispone la ley, pero cuando no hay funcionarios la ley dispone el paso a seguir que es la inopia. Hemos traído gente de afuera donde hay un concurso público, no hay favoritismo político. Invito a una sola persona que diga que fue nombrada por un criterio político.
En lo que llaman la arena política, ¿hay cercanía con el PUSC, específicamente con Rodolfo Piza? ¿Le han estado sugiriendo nombres a cambio de un puesto?
-En absoluto. (risas) Jamás, a mí no me interesa permanecer en nada. Yo vengo del sector privado, y voy a volver al sector privado, no me interesa seguir en otro Gobierno. No necesito pagarle un favor político a nadie, ni que me pague a nadie. No solo es lo más indecente, sino que nunca lo he hecho ni me interesa. A la única persona que le debo el puesto en el que estoy, y lo hago por un servicio a él, es el Presidente.
¿Ha considerado dejar el puesto ante los cuestionamientos de actores políticos como diputados?
-¿Cuáles diputados?
Le puedo mencionar, don Rolando González, Mario Redondo… (interrumpe)
-(Se ríe) Ay por favor….
¿Le parece risible los diputados?
-Dígame gente que valga la pena tomar en consideración. No son las fuentes de crítica más confiables. Ellos pueden decir con la inmunidad de diputados lo que quieran, y no asumen ninguna responsabilidad. Y los ciudadanos comunes y corrientes no podemos hacer nada. Tenemos que aguantarnos lo que diga un precandidato
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CRÉDITOS: Foto: David Barrantes
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Miércoles 22 Febrero, 2017
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