Unas 41 fincas lecheras de las regiones Huetar Norte, Chorotega, Central Occidental, asociadas a Coopebrisas, Coopeleche, Sigma Alimentos, entre otras, entrarán en un plan piloto de un proyecto de adaptación al cambio climático.
La iniciativa se anunció ayer como parte del Día Mundial de la Leche y será desarrollada con el aporte del Fondo de Adaptación de Naciones Unidas, gestionados por Fundecooperación y la Dirección de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente.
Se trata de $400 mil que la Cámara Nacional de Productores de Leche, el Ministerio de Agricultura y Ganadería y las principales industrias lácteas emplearán en el inicio del proceso.
La idea es implementar tecnologías que permitan reducir la vulnerabilidad y mejorar el desempeño económico de las fincas, convirtiéndose en escuelas para procesos de capacitación a productores. El periodo de vigencia de este proyecto es 2016 a 2020.
Las experiencias de adopción de tecnologías y el análisis de resultados permitirán extender el conocimiento a otros productores a través de escuelas del campo para sensibilizar sobre la importancia de la adaptación temprana al cambio climático y emergencias de otros tipos.
Como complemento, el Ministerio puso a disposición el Fidecomiso con el Banco Nacional, por un monto cercano al $1 millón, para que los ganaderos puedan acceder a mejores condiciones crediticias relacionadas con el proyecto.
El plan se encuentra dentro de la Red Nacional de Pastos y Forrajes, pretende generar investigación y transferencia efectiva de las mejores prácticas en torno al recurso forrajero, en procura de reducir los costos de alimentación en la producción animal, y reducir la exposición al cambio climático.
La adecuada planificación del recurso forrajero para épocas de crisis es sumamente importante, según Erick Montero, director ejecutivo de la Cámara Nacional de Productores de Leche.
“El éxito de una finca productora de leche es maximizar el consumo de forrajes, hoy vemos aumentos en las lluvias y en la temperatura que afectan el crecimiento de los pastos, lo que genera condiciones para el avance de plagas y enfermedades, costos de producción crecientes y sistemas de producción altamente dependientes de las importaciones de granos e insumos”, agregó.
Otro de los anuncios fue el aporte de $1,1 millones, por parte de la agencia estadounidense de cooperación (Usaid) para implementación de la Estrategia para la ganadería baja en carbono, investigación y transferencia tecnológica.
PERIODISTA: María Siu Lanzas
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Jueves 02 Junio, 2016
HORA: 12:00 AM
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