El alto porcentaje de inmigrantes, tanto legales como irregulares, en el país no es del agrado de la mayoría de costarricenses, quienes consideran que el Gobierno de Costa Rica debería evitar el ingreso excesivo de estas personas.
La empresa CID-Gallup determinó, a través de encuestas a los ticos, que la percepción del país indica que se desea disminuir la cantidad de nicaragüenses que vienen a vivir junto a sus familias a esta nación.
De acuerdo con el estudio, un 70% de la población inmigrante corresponde a pinoleros, por lo que un 86% de costarricenses califica el número como “demasiado”, alegando además que el país deberá comenzar a implementar herramientas para evitar tanto flujo migratorio de extranjeros.
DIARIO EXTRA consultó a la Dirección de Migración y Extranjería sobre la cantidad de personas que escapan de Nicaragua hacia Costa Rica, pero informaron que nadie podía atender para ese asunto.
Las otras tres nacionalidades que representan los extranjeros más numerosos en el país son cubanos en segundo lugar con un 6%, colombianos con un 5% y jamaiquinos con un 2%.
Sin embargo para los ticos es más importante disminuir el ingreso de colombianos que el de cubanos y caribeños debido a presuntos vínculos criminales.
El costarricense es selectivo sobre qué tipo de gente extranjera desea que llegue al país. Los inversionistas, empresarios que traen dinero para crear empresas y fuentes de empleo son muy bien recibidos.
En segundo lugar los científicos e investigadores también serían queridos en el país. Por el contrario, los peones de construcción (generalmente nicaragüenses) no deberían ser invitados al país.
Los últimos eventos en las fronteras de Peñas Blancas y Paso Canoas, con la presencia de miles de cubanos y africanos, también generaron molestia en la comunidad nacional, debido a la débil guardia del gobierno del presidente Luis Guillermo Solís.
