Jueves 02, Mayo 2024

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° San José, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Alajuela, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Cartago, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Heredia, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Limón, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Guanacaste, CR

  • Pronóstico del tiempo

    ° / ° Puntarenas, CR

Opinión

La no existencia de la doble moral

Johao Larios*

El físico-matemático y filósofo Blaise Pascal decía: “La conciencia es el mejor libro de moral que tenemos.”. Partamos de esta frase para analizar la existencia de la tan trillada frase de “El tico y su doble moral”.

La conciencia, en este caso vamos a interpretarla como ese conocimiento que tenemos de uno mismo, de nuestro actuar y de nuestro pensar. La interpretación de la realidad desde la perspectiva interior desarrollada a través de los años a partir de todas las variables externas de nuestras experiencias. La definiremos también como la interpretación que les damos a nuestras acciones y pensamientos de lo que es “bueno o malo”.

 La moral. ¿Qué es la moral? Difícil respuesta. Para el objetivo de este escrito, diremos que tomando en cuenta la anterior definición de conciencia, la moral es nuestra interpretación del bien y el mal en el sentido amplio de todas las acciones que nos rodean. En la mayoría de casos, creemos que el “bien” es lo que yo hago, mis reglas de vida. Mi praxis cotidiana. Indiferentemente de la cultura en la que me encuentre cohabitando con otros seres humanos. La sociedad misma es quien determina en colectivo lo que pertenece a un lado o al otro. 

Con la invención de la literatura, entendemos que con el tiempo varía lo que el inconsciente colectivo nos interpone cómo buenas o malas acciones. 

La conciencia-moral viene también de la mano de sentirnos mejores (¿superiores?) respecto a los demás, por ejemplo: “si me comporto bien (relativo al juicio social antes mencionado), soy por tanto un ser superior que aquel que actúa ‘mal’”. 

Podríamos entonces afirmar, que la moral está supeditada por mis propias creencias (ejemplo: religión) y experiencias personales y colectivas. Por tanto, la doble moral, no existe. Lo anterior (la doble moral) no es sino una manifestación de contradicciones ideológicas o de praxis de la vida misma. Lo que yo determine como bien, puede ser (muy probable que así sea) algo que sea visto como un acto del mismo satanás por otra persona o cultura. Entonces, finalizando, no existe la tan mencionada “doble moral” sino más bien, algo que tendría que considerarse peligroso: Seres humanos que no son capaces de apegarse a un credo, a una práctica social o a un conjunto de acciones éticas para crear desde su posicionamiento pensamientos, críticas o razonamientos que sean duraderos en el tiempo en cuanto a fondo y caracterización de los mismos. Es decir, personas con doble discurso y doble praxis, no doble moral. Lo que conlleva un choque con la conciencia misma, como lo decía Leon Tolstoi: “Vivir en contradicción con la razón propia es el estado moral más intolerable”.

 

*Estudiante Ingeniería en Sistemas

 

PERIODISTA:

EMAIL:

Jueves 14 Abril, 2016

HORA: 12:00 AM

Enviar noticia por correo electrónico

SIGUIENTE NOTICIA

ÚLTIMA HORA