“Es como si hubiera tenido dos hijos, uno heterosexual -suponía yo- y el otro cuando yo me enteré que era homosexual. El primero fue muy reservado, con el otro era auténtico”. Con esas palabras recuerda doña Virginia Dahme el proceso de aceptar la homosexualidad de su hijo Christian.
Aunque es un proceso completamente superado, asegura que en momentos “yo me cuestioné mucho en qué fallé, qué le hice”, para luego concluir: “Estoy completamente segura de que no interfirió ningún motivo social, él nació así”.
Para Dahme “la sociedad es heterosexual, hay que cambiar la forma de pensar, el proceso fue larguito, pero siento que lo asimilé en forma completa. Mi hijo es un muchacho muy bueno y tuvo la suerte de encontrar este otro chiquillo que vino de una familia bien conservadora de origen campesino, son de esas familias donde reina el amor, tan grande que está por encima de los prejuicios”.
Junto a su hijo y su yerno celebró el fallo del juzgado de familia, aunque para ella es solo un compromiso social. “Él me apoya mucho, yo lo quiero mucho a él. Son una pareja que quisiera una pareja heterosexual tener el tipo de vida y la forma en que ellos comparten. Es como un compromiso social, para mí ellos ya estaban bien”.
PERIODISTA: Redacción Diario Extra
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Miércoles 03 Junio, 2015
HORA: 12:00 AM
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