En la madrugada de ayer la policía detuvo a dos miembros de banda robacarros tras una persecución en contravía.
Pasadas las 5 a.m. los oficiales de la Fuerza Pública detectan un vehículo sospechoso en San José con cuatro hombres abordo. Le hacen señas al conductor para que se detenga, pero lejos de hacer caso intentan darse a la fuga y empezó la persecución desde la capital hasta San Francisco.
Los pocos carros que a esa hora transitan por las calles permitieron que los sospechosos avanzaran rápidamente para escapar de la policía, no obstante los oficiales se mantuvieron cerca de ellos en todo momento, sin perderlos de vista.
La desesperación del conductor lo llevó a cometer una imprudencia que pudo haber generado una tragedia cuando durante varios metros manejó en contravía.
Sin importar lo que había a su alrededor, el sujeto que manejaba el vehículo blanco parecía no quitar el pie del acelerador y seguía su camino con la mirada puesta sobre el oscuro asfalto de la madrugada.
Avanzaban y por el retrovisor el sujeto que intentaba mantener el control del volante, mientras huía con sus tres amigos, observaba la patrulla que los seguía de cerca.
Solo se les ocurrió lanzar a la calle dos paquetes con aparente droga y un arma de fuego.
En el cruce de San Francisco y San Antonio el conductor del carro blanco por la velocidad que llevaba no logró tomar la curva y el carro quedó pegado en la cuneta.
No les dio tiempo de huir a pie porque cuando abrieron las puertas, los policías estaban listos para detenerlos. Dos quedaron detenidos como sospechosos de pertenecer a una banda dedicada a robar carros.
Ambos requirieron atención de la Cruz Roja por varios golpes que sufrieron a causa de la colisión con la acera.
Los trasladaron a celdas judiciales y esperan medidas cautelares que pedirá la fiscalía, además podrían enfrentar cargos por conducción temeraria.
